Una operación conjunta de la Policía Nacional y de la Guardia Civil desarticuló en Vilagarcía una red de butroneros albanokosovares que actuaba en naves industriales de las provincias de A Coruña y Pontevedra. Se les atribuyen más de una treintena de robos. El último golpe lo habrían dado la pasada semana en el de O Pousadoiro (Vilagarcía), en una empresa conservera. Para realizar su fechoría, los cacos, que en todo momento utilizaron guantes para no dejar huellas, llevaron todo tipo de herramientas, incluida una escalera con la que accedieron a la zona superior trasera de la nave y rompieron un potente foco de iluminación.

Las fuerzas del orden llevaban tiempo siguiendo a esta banda del Este afincada en Vilagarcía. La operación estalló la madrugada de ayer, pasada la una y media de la madrugada, cuando más de una docena de agentes armados y encapuchados desembarcaron en el número 3 de la calle Nogueira, justo detrás del pabellón de Fexdega, para detener a los presuntos delincuentes.

Aunque las detenciones se desarrollaron de madrugada, los registros de estos domicilios no comenzaron hasta las dos de la tarde. El primero, en el piso de la calle Figueira. Hasta allí se desplazaron agentes de cuerpos especializados de la Policía Nacional y de la Guardia Civil (como la Policía Judicial), en ambos casos de A Coruña, de donde procede la causa. Todos iban vestidos de paisano y viajaban en coches camuflados.

El registro se realizó en presencia de uno de los detenidos, supuestamente el que llevaba viviendo en ese inmueble desde hacía un año.

Al finalizar la inspección de este domicilio, del que los investigadores se llevaron varias cajas, comenzó el de la calle Nogueira, al filo de las cuatro de la tarde. También se ejecutó en presencia de los tres ciudadanos albanokosovares que residían allí y que fueron apresados. Los policías decomisaron diverso material que los butroneros presuntamente utilizarían en sus golpes, como cuerdas de un grosor considerable (alguna parecía nueva, sin estrenar), una cizalla, una escalera o varias patas de cabra, entre otros objetos. Asimismo, se llevaron varios cajas y bolsas.

La operación, que sigue abierta, también se saldó con tres vehículos incautados, entre ellos un Skoda y un Seat Ibiza.