Un estudiante de 17 años mató ayer a diez personas en la escuela secundaria Santa Fe, un suburbio de Houston, en Texas (EEUU), con una escopeta y un revólver calibre 38 de su padre. Las autoridades locales identificaron al autor del tiroteo como Dimitrios Pagourtzis. El adolescente asaltó su escuela a primera hora de la mañana, causando una decena de muertos y múltiples heridos, según las primeras informaciones de la cadena de televisión CBS.

Capturas de pantalla de las cuentas en las redes sociales de Pagourtzis, publicadas por diferentes medios, muestran cómo el joven colgó imágenes de armas, fotos con símbolos nazis y una camiseta con el lema Born to kill ("Nacido para matar", en inglés). De hecho, varios alumnos aseguraron a la televisión local de Houston que el joven vestía esa camiseta en el momento del tiroteo, además de llevar botas militares y una gabardina.

Además de Pagourtzis, la policía está interrogando a otra persona en relación con el suceso, según anunció en una rueda de prensa Ed González, sheriff del condado de Harris, demarcación en la que se encuentra Santa Fe. Un profesor vio a un alumno dirigirse hacía el centro educativo con un arma de fuego, por lo que decidió accionar la alarma de incendios y advertir al resto para que abandonaran el lugar. Los estudiantes salieron corriendo de las aulas, momento en el que el sospechoso comenzó a disparar contra ellos. El atacante estaba armado con un rifle, una pistola y una escopeta.

Antes de los disparos, algunos estudiantes aseguran que se escucharon varias explosiones, hecho que posteriormente confirmó el Distrito Escolar de Santa Fe, tras el hallazgo de artefactos explosivos tanto dentro de la escuela como en los alrededores del campus.

Este es el peor tiroteo escolar después del sucedido el 14 de febrero en una escuela secundaria de Parkland (Florida, Estados Unidos), en el que fallecieron 17 personas.