El creador de The Walking Dead, Robert Kirkman, y varios productores de esta serie sobre zombis denunciaron ayer a la cadena televisiva AMC por considerar que el reparto de sus beneficios no ha sido justo.

La demanda fue presentada en un juzgado de Los Ángeles por parte de Kirkman, que es también el autor de los cómics de The Walking Dead en los que se basa la serie, y los productores Glen Mazzara, David Alpert y Gale Anne Hurd. "Este caso surge a partir del incumplimiento por parte de un gran conglomerado del entretenimiento de sus obligaciones contractuales con el personal creativo, el talento en la jerga de la industria, detrás de una serie televisiva longeva, enormemente rentable y extremadamente exitosa", señala la denuncia.

La acusación basa sus argumentos en que AMC se aprovechó presuntamente de la integración vertical de su estructura para llevarse más beneficios de The Walking Dead de los que les correspondían.

AMC Studios es la compañía que se encarga de producir la serie mientras que AMC Network es la cadena que la emite, pero ambas empresas son propiedad del grupo AMC. "Cuando una productora y una cadena son parte de un mismo conglomerado, como es el caso de esta serie, existe un poderoso incentivo financiero de mantener la parte más sustanciosa de los beneficios en el nivel de la cadena", argumentó la demanda, que asegura que los creadores obtendrían mayores réditos si se desplazara ese dinero hacia la productora.