A la hora de decorar una casa, el estilo moderno está a la orden del día. En Internet, en la televisión o en las revistas de decoración de interiores nos encontramos con salones de diseños actuales tan espectaculares que nos creemos incapaces de plasmarlos en nuestra propia casa. Para conseguirlo, te presentamos algunas de las ideas más sencillas con las que podrás dar un toque moderno a tus salones.
Apuesta por un estilo minimalista. Los tonos claros, la amplitud, la escasez de elementos decorativos, la luminosidad espacial y los muebles de líneas sencillas, son perfectos para conseguir un diseño de lo más actual.
En cuanto al color, el blanco se ha convertido en el protagonista absoluto de los salones modernos. Los fondos de paredes blancas con combinaciones de tonos planos, como el negro y el gris, son ideales para conseguir el estilo que queremos y aportar luminosidad y continuidad a los espacios.
Además de utilizar colores claros para conseguir unos salones modernos, utiliza pinceladas de negro o de otros tonos oscuros para completar la gama cromática de la habitación. Si prefieres usar colores llamativos para los detalles del salón, prueba a combinarlo con tonos de gris. Este, además del blanco, es un color que cada vez se usa más para conseguir ambientes modernos y atemporales ya que es muy fácil de combinar y se adapta a estilos tanto clásicos como vanguardistas.
En la decoración de salones modernos lo mejor es optar por mobiliario sencillo y de líneas simples. Los muebles con acabados en brillo, rectos y bajos también son una buena apuesta. El lacado de los muebles, la piel de los sofás, el pelo de las alfombras y el cristal de las mesas son algunos de los materiales más recurrentes en los estilos modernos y vanguardistas.
Como en todo estilo minimalista, lo puro y lo proporcionado se impone ante los ambientes más sobrecargados. Por eso, si lo que quieres es conseguir este estilo en tus salones, utiliza sólo el mobiliario que te sea más necesario para tu día a día y olvídate de recargar la habitación.
La iluminación juega un papel fundamental en este estilo. Por el día deja paso a la luz natural para dar luminosidad a la habitación. Sin embargo, si no cuentas con grande ventanas, opta por unos focos halógenos o de LED incrustados en el techo y repartidos por toda la para conseguir unos salones modernos y funcionales. Otra de las fuentes de iluminación que mejor van con este estilo son las lámparas de pie en los puntos que quieras alumbrar especialmente, como por ejemplo cerca del sofá o del sillón de lectura.
