El príncipe Akishino, hijo menor del emperador Akihito de Japón, visitó ayer Río de Janeiro, última escala de su gira de dos semanas por Brasil, que concluirá hoy. Akishino y su esposa Kiko participaron en la reinauguración de un jardín de estilo japonés ubicado en el Jardín Botánico de Río de Janeiro, que ha sido reformado.