La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, brindó anteayer por "la paz en todo, en lo cotidiano, en lo pequeño y en el mundo", con cerca de doscientas personas sin hogar, en una cena de Nochebuena en el Palacio de Cibeles, organizada por la ONG Mensajeros por la Paz, que dirige el padre Ángel. También asistió el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro.

"Navidades felices, mucha felicidad a todos y, en este día, paz. Paz en todo, en lo cotidiano, en lo pequeño y en el mundo. Por la paz y por el padre Ángel", dijo Manuela Carmena a los comensales. El menú para esta ocasión: sopa de marisco, langostinos, cordero asado o dorada, postre y dulces. Y también hubo regalos.

Desde las mesas engalanadas, un numeroso grupo de personas de entre 20 y 70 años, la mayoría españoles pero también extranjeros sin recursos, han seguido con emoción el brindis de la alcaldesa y el padre Ángel, párroco de la iglesia de San Antón, que les da cobijo cada noche y les ofrece a diario desayunos, cenas y otras ayudas de primera necesidad.

Por vez primera, el Ayuntamiento de Madrid les abre sus puertas, atendiendo a una iniciativa del padre Ángel, que asegura haberse inspirado "en el papa Francisco", y ha recalcado que "en la solidaridad no hay ni ideologías, ni colores, ni religiones".

Para el padre Ángel, esta Nochebuena "tiene toda la importancia del mundo, para decir al mundo entero y a los cuatro vientos que somos solidarios con los menos favorecidos, que tenemos la solidaridad a flor de piel". El objetivo de esta invitación es "hacer felices a estas personas, darles amor y cariño, y que al menos una vez al año y algunos por primera vez en su vida puedan sentarse en una mesa con flores, con servilletas rojas y las sillas vestidas de blanco". Los comensales han llegado en taxis, "como unos señores que es lo que son, personas con dignidad", ha explicado el párroco que también ha agradecido al gremio de taxistas madrileños, que se ha ofrecido a trasladarlos gratuitamente.