La cantante Isabel Pantoja abandonó ayer por la mañana la prisión de mujeres de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), en la que cumple una pena de dos años por blanqueo de capitales, gracias a un nuevo permiso por el que podrá pasar los Reyes Magos en su domicilio.

Pantoja regresó el lunes por la noche a la cárcel tras pasar la última semana fuera del centro con un permiso y ayer, poco después de las 07:30 horas, abandonó junto a su hermano Agustín el centro penitenciario, donde un grupo de seguidores la esperaba para despedirla.

Pantoja, que salió envuelta en un abrigo oscuro y llevaba sus habituales gafas de sol, puede estar una semana fuera de prisión porque ya tiene el tercer grado o régimen de semilibertad desde el pasado 13 de diciembre, que le permite pernoctar de lunes a jueves en un establecimiento penitenciario y el fin de semana en su casa.

De esta forma, la cantante ha pasado la Nochebuena y la Nochevieja fuera del recinto penitenciario, y lo mismo hará esta semana para los Reyes Magos, según fuentes penitenciarias.

Está previsto que Pantoja regrese a la cárcel, en la que entró el 21 de noviembre de 2014, el próximo lunes 11 de enero antes de las 22.00 horas.