El cantante de rock estadounidense Chris Isaak confesó haber "aprendido" a divertirse mientras grababa su decimotercer álbum de estudio, First Comes the Night, en la capital mundial del country, Nashville (Estados Unidos). El también actor habló ayer con Efe para presentar, tras cuatro años de silencio, su nuevo disco, a la venta desde el pasado viernes y en el cual indaga sobre el amor y la soledad.

"Cuanto más mayor te haces, más importante es la lección que aprendes y ahora sé cómo pasármelo bien", explicó el intérprete de 59 años, que dejó claro que sigue fiel a su estilo rockero, a pesar de crear su nuevo trabajo en la cuna del country.

Así, el artista, que ha unido fuerzas con productores como Paul Worley y Dave Cobb, afirmó que para él la muerte de David Bowie fue como ver "una campana sonando que decía: 'tu tiempo no durará eternamente, disfruta de ti mismo".

El autor de composiciones como Wicked Game deja atrás su anterior álbum de versiones, Beyond the Sun (2011), para presentar un trabajo repleto de canciones de amor: "Para mí este sentimiento es el asunto más importante sobre el que escribir y todo lo demás son canciones estúpidas".