El duque de Kent, la actriz de Juego de Tronos Maisie Williams y extenistas como la estadounidense de origen checo Martina Navratilova y la española Arantxa Sánchez Vicario presenciaron ayer desde el palco de honor la final femenina de Wimbledon. Junto a ellos también se sentaron para ver el encuentro entre la estadounidense Serena Williams y la alemana Angelique Kerber, la presentadora Ellen DeGeneres y otras figuras del deporte blanco como la francesa Marion Bartoli, ganadora en el All England en 2013. Navratilova, que ganó nueve veces el major británico, disfrutó muchísimo del partido.