El cantaor flamenco José Menese falleció la noche del viernes en su casa de su localidad natal, La Puebla de Cazalla (Sevilla). Nacido el 3 de diciembre de 1942, estaba considerado uno de los más grandes cantaores no gitanos de la historia, con un estilo elogiado por colegas y críticos, y hasta por escritores como Rafael Alberti, Fernando Quiñones o Antonio Gala. Algunos expertos en flamenco lo situaban a la altura de cantaores como El Lebrijano, fallecido el pasado 13 de julio, en unos días negros para el flamenco, que también perdió el pasado 30 de junio al guitarrista Juan Habichuela, y tres semanas antes a la cantaora Juana la del Revuelo.

A lo largo de su carrera, José Menese grabó una treintena de discos; el primero, en 1963, llevaba por título su propio nombre y estaba compuesto por varios palos de soleá, siguiriya, bulerías y mirabrás, acompañado a la guitarra por Melchor de Marchena y Eugenio Jiménez. La última vez que entró en un estudio de grabación fue en 2005, para sacar al mercado A mis soledades voy, de mis soledades vengo. Fue el primer artista flamenco en actuar en el Teatro Olympia de París y durante su trayectoria acumuló un sinfín de galardones como el Premio de Honor Tomás el Nitri, el Concurso de Cante Flamenco de Córdoba, y en 1996 una Mención especial de los Premios Ondas

Menese falleció pocas semanas antes de que la localidad sevillana de Mairena del Alcor le dedicara a su figura el Festival de Cante Grande Antonio Mairena, que se celebrará en septiembre y que este año se había concebido como un homenaje a la carrera del cantaor. También tenía previsto recibir un homenaje en agosto en el Festival Flamenco de la localidad jienense de Alcalá la Real. La doctora en Filología Románica y directora de la colección de flamenco de la editorial Almuzara, Génesis García, publicó su biografía en 1996, bajo el título de Biografía Jonda.

Menese formaba parte del conjunto de cantaores que irrumpió con fuerza en los años 60, con voces como la de El Lebrijano, Antonio Fernández Díaz Fosforito, José Sánchez Bernal Naranjito de Triana, Antonio Núñez Montoya El Chocolate, Antonio Cortés Pantoja Chiquetete y Camarón de la Isla.

Era un cantaor que bordaba la seguiriya, uno de los pocos payos que han destacado en un arte que parece reservado para los calés. Y es que Menese no cantaba seguiriyas, sino que las usaba para contar de una forma personal lo que transmitía al público, en un estilo definido por él mismo como "puñetero", y que suponía para él "un sufrimiento sicológico y físico".

Menese nunca se cortaba, ni para cantar ni para opinar. Se sacó el carné del Partido Comunista en 1968 y siempre estuvo al día de las cuotas, y cuando le preguntaban por la situación de España lamentaba que era el trabajador de base el que sufría la crisis y al que había que proteger.