La reina Sofía ha reunido a todos sus nietos en Mallorca para pasar unos días de vacaciones, incluido los cuatro hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín que llegaron tres día después que el resto de sus primos a la isla. Pese a que sus padres no pasan las vacaciones con la familia real desde hace cinco años por la polémica del caso Nóos, los pequeños Juan, Pablo, Irene y Miguel siguen fieles a la cita estival en Palma.

El pasado lunes, la infanta Elena acompañó a sus hijos Froilán y Victoria a Calanova, donde iniciaron el curso de vela que cada año siguen durante cinco días en esa escuela, en veranos anteriores junto a sus primos Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarín, quienes ayer también han salido a navegar, aunque no es seguro que como parte del mismo cursillo.

Pasadas las diez de la mañana de ayer era la reina Sofía quien llegó a Calanova al volante de su automóvil, en el que la acompañaban Victoria e Irene, mientras que los otros cuatro nietos ocupaban un segundo vehículo.

Representantes del club y la escuela de vela recibieron y saludaron a todos ellos en la terraza del club, donde la Reina se despidió de sus nietos e intercambió unas palabras con el hijo mayor de doña Elena antes de regresar sola al Palacio de Marivent.

Por otra parte, los Reyes y sus hijas, Leonor y Sofía, realizaron ayer su clásico posado de las vacaciones estivales en los jardines del Palacio de Marivent en Palma.