El cantaor Miguel Poveda, padre de un hijo nacido en EEUU por gestación subrogada, abogó ayer por la regulación de este proceso en España tras la detención de una pareja de hombres en Vícar (Almería) y una mujer de Villamartín (Cádiz) por la supuesta venta de un bebé nacido de un vientre de alquiler. "Es un hecho que tiene que servir para que los políticos entiendan que se tiene que hacer de manera ordenada y legal, como se hace en EEUU, donde es una práctica muy común", señaló el artista flamenco en declaraciones a Efe.

Poveda considera que existe "un desconocimiento total" en torno a la gestación subrogada. "No es un alquiler, que es una palabra feísima. Hay una compensación económica, pero donde se va más dinero es en abogados", explicó el artista. El músico quiso subrayar que, en su caso, había "una donante de óvulo y otra persona que de forma altruista prestó su vientre". "Hay gente que cree que lo hacen mujeres pobres que necesitan el dinero y a las que compras su hijo. La familia que a mí me ayudó vivía en una casa preciosa", subrayó Poveda, que lamenta que lo que va a quedar del caso de Cádiz es el "insulto fácil" de "dos maricones que han querido ser padres y se han comprado un niño".