La cantante, modelo y artista multidisciplinar Bimba Bosé, de 41 años, falleció en Madrid tras una larga lucha contra el cáncer de mama, una enfermedad que padecía desde hace más de dos años. Rodeada de sus hijas y familia más cercana, la sobrina del cantante Miguel Bosé e hija de Lucía Dominguín Bosé falleció en el Hospital Ramón y Cajal, donde ingresó el pasado martes procedente de Sotogrande (Cádiz), donde vivía retirada desde hacía unos meses. La familia pidió en un comunicado "que sea respetada su privacidad en estos difíciles momentos" para dar su último adiós "en la más estricta intimidad" a Bimba, tras una lucha contra el cáncer "larga, valiente y heroica", y agradeció "profundamente las muestras de cariño recibidas en todo este tiempo".

La artista, que sufría metástasis en huesos, hígado y cerebro, confirmó su enfermedad, en mayo de 2014, con una fotografía en su perfil de Facebook, en la que aparecía con un pañuelo que cubría su cabeza, señal del tratamiento al que se estaba sometiendo. Durante la enfermedad, contra la que luchó junto a su actual pareja, el también modelo y DJ inglés Charlie Centa, la musa del modisto David Delfín, su gran amigo, siempre mantuvo una actitud positiva y continuó trabajando durante todo el tiempo que pudo, sin perder la sonrisa, convencida de que vencería al cáncer.

La nieta del torero Luis Miguel Dominguín, que en mayo de 2014 se sometió a una mastectomía de la mama izquierda, desfiló meses después, en septiembre de ese año, en Mercedes-Benz Fashion Week Madrid para Delfín, con varios modelos que evidenciaban la pérdida del pecho. La cantante, que ejerció su profesión de modelo hasta el pasado verano, era madre de dos hijas, Dora y June, de 13 y 5 años, fruto de su relación con Diego Postigo.

Bimba Bosé (la "niña", en italiano) insistió durante su carrera en trazar un camino propio, constante y osado. A la familia, decía esta mujer nacida como Eleonora Salvatore, hay que mantenerla en una "cercana lejanía" y guiarse por el "instinto" en determinados momentos. "No me gusta repetir patrones, pero sí quedarme con lo bueno. Hay que aprender del pasado", añadía.

Su empeño no significó nunca renunciar a las raíces, como demuestra el hecho de que portara orgullosa el apellido de su abuela, Lucía, musa de Michelangelo Antonioni y miss Italia 1947, de quien heredó su particular canon de belleza, su pulsión creativa y su gusto por transitar por las lindes de lo establecido. También de ella se dijo a menudo que era "la musa de...". "No me siento musa, este es un proyecto en el que he crecido mucho", precisaba.

Detrás de todos su proyectos, siempre había "una necesidad profunda de expresión", también cuando se embarcó en la música junto al grupo The Cabriolets (también tocó con la banda The Warriors), siendo ya un rostro más que conocido en la moda.

Ya había testado sus dotes musicales siendo una adolescente junto a Rafa Sánchez (de La Unión) y al lado de su tío Miguel Bosé, pero su posicionamiento tras el micrófono se vistió casi siempre al margen de las fórmulas del éxito comercial evidente. Debutó cantando una versión de Como yo te amo, de Rocío Jurado, y en sus grabaciones abundó el inglés, con una mezcla de pop, rock, soul y rythm & blues, conjugando el sabor de sellos clásicos como Motown y Blue Note. En la memoria quedará su exitosa colaboración con su tío en uno de los mayores éxitos de Papito (2007), la mejor versión de Como un lobo, lupina ella también en su andar, ligera en sus graves y lúdica en su agresividad. Incluso escribió un libro sobre su experiencia como madre, faceta en la que, curiosamente, se revelaba como "muy clásica".

"Me cuesta decir no al trabajo. Disfruto mucho de lo que hago", solía comentar la artista, que también probó a subirse a las tablas con un espectáculo que celebraba sus orígenes italianos y el cine. A menudo apostó por la transversalidad artística. Así, abrió al director Álex de la Iglesia las puertas de su estudio para mostrar en un documental los entresijos de la creación de una colección y hasta pinchó música como DJ.