La policía ha dejado en libertad con cargos al operario de iluminación de la gala de los premios Goya que el pasado jueves se entregó en la comisaría del distrito madrileño de San Blas para confesar que había robado unas joyas valoradas en cerca de 30.000 euros y que devolvió a los agentes.

Fuentes de la investigación señalan que la decisión se adoptó después de tomar declaración al detenido, un hombre de unos 50 años y sin antecedentes, que a las 20.00 horas del jueves confesó el robo a la policía, a quien entregó los cuatro pares de gemelos, la sortija y el juego de pendientes de la marca Suárez. El arrestado queda ahora a la espera de ser citado por el juzgado que instruye el caso.