Las firmas Carolina Herrera y Óscar de la Renta fueron las protagonistas de la quinta jornada de la Semana de la Moda de Nueva York y presentaron sendas colecciones en las que dominaron la elegancia, la sofisticación y la feminidad. Herrera, de origen venezolano, presentó en la pasarela neoyorquina largos vestidos y faldas de vuelo o plisadas desde la cintura, en ocasiones combinadas con la mítica camisa blanca, y el contraste de materiales como el algodón, el cuero, el terciopelo, la seda y otras telas. El cuidado por los detalles se manifiesta en las capas de las chaquetas y los abrigos, así como los lazos negros que decoran las faldas, los cuellos y las mangas de las camisas y los vestidos, lo que aporta un toque romántico y extra femenino a las prendas.

Por su parte, la casa de moda Óscar de la Renta presentó bajo el liderazgo de sus nuevos codirectores, Laura Kim y Fernando García, su primera propuesta otoño/invierno tras regresar a la firma el pasado septiembre, sustituyendo al inglés Peter Copping. Fieles al glamour que ha caracterizado a esta firma, los diseñadores se decantaron por vestidos palabra de honor o con un solo hombro tanto largos como cortos, la mayoría de ellos ceñidos a la cintura tipo corsé.