El juez de Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón, Enrique Presa, ha procesado al banquero Jaime Botín por un delito de contrabando relacionado con el cuadro de Picasso -valorado en 26,2 millones de euros- que sacó de España sin autorización y que fue incautado en un barco atracado en el puerto deportivo de Calvi (Córcega) en agosto de 2015. El banquero planeaba trasladarlo a Suiza.

La resolución el juzgado supone la conclusión de la instrucción de este asunto, que concluye con la continuación del procedimiento contra Botín y el archivo de la causa respecto del patrón de la embarcación, Paul Fredererick Goss, al no quedar acreditado que tuviera conocimiento de la prohibición de exportación o salida del país de la obra.

El cuadro Cabeza de mujer joven y pintado por el artista malagueño en 1906 está declarado Bien de Interés Cultural y no podía salir de España según estableció en mayo de ese mismo año la Audiencia Nacional. Este órgano judicial avaló mediante su resolución una orden dictada por el entonces ministro de Educación que declaraba la "inexportabilidad" de la obra por su elevado valor artístico. El auto señala que en diciembre de 2012 la empresa Christie's Ibérica, actuando en nombre de Jaime Botín, solicitó permiso para la exportación definitiva de la obra, algo que se denegó y la firma señaló que sería un error ya que la obra siempre estuvo en el extranjero. Tras su búsqueda apareció en un barco.