Irlanda es el escenario en el que se produjo el reencuentro entre el rey Juan Carlos I y Marta Gayá. La decoradora mallorquina fue el "gran y verdadero amor" del monarca desde que comenzó su relación de amistad en el año 1989, según confirmaban unas grabaciones del CNI que salieron a la luz a principios de año, en las que el entonces Rey hablaba sobre su vida sentimental.

Marta Gayá es hija de una acaudalada familia mallorquina, se casó muy joven y se divorció al poco tiempo, entró a formar parte del círculo más exclusivo de la noche en Mallorca, donde conoció a Juan Carlos I. La decoradora y el emérito rey han sido grabados juntos en la reapertura de una Iglesia reconvertida en galería de arte en Clonmellon, un pequeño pueblo cercano a Dublín.

Gayá fue invitada por Juan Carlos para acompañarle en este acto, al que asistieron otras cien personas. Entre los asistentes se encontraban fotógrafos de la prensa local pero no obtuvieron ninguna fotografía de Gayá y Juan Carlos. El rey emérito, fue el gran ausente en las tradicionales vacaciones en Mallorca de la familia real. En su lugar el padre de Felipe VI ha decidido pasar un tiempo con sus amigos en una mansión irlandesa.