Woody Allen se ha pronunciado sobre el escándalo en el que está inmerso su amigo personal, y productor de varios de sus filmes, Harvey Weinstein, acusado de abusar sexualmente de forma sistemática de actrices y asistentes durante décadas. Allen se ha mostrado triste por lo ocurrido y también muestra su preocupación ante el hecho de que este caso pueda desatar "una caza de brujas en Hollywood".

"Esta situación es muy triste para todas las personas que están involucradas. Trágico para las pobres mujeres y triste para Harvey porque su vida está hecha un desastre. No hay ganadores en esto. Es muy, muy triste y trágico para las mujeres que tuvieron que vivir esto", señala Allen en una entrevista concedida a la BBC en la que también mostró su preocupación ante el clima que este tipo de casos pueden generar en la industria.

"No quiero que esto se convierta en una caza brujas, en una atmósfera como de Salem, en la que cada hombre que le guiñe el ojo a una mujer tenga que llamar a un abogado para defenderse. Eso tampoco está bien", afirma Allen que también asegura que nunca tuvo conocimiento sobre los abusos. "Nadie me contó nada realmente serio sobre estas terroríficas historias", señaló.