La actriz australiana Nicole Kidman, de 50 años, inauguró ayer la temporada navideña del exclusivo centro comercial parisino Printemps, cuyos escaparates se convierten en esas fechas en parada habitual de lugareños y turistas. La intérprete, invitada por la casa Fendi y vestida con chaqueta blanca de manga abullonada y falda verde, cortó la cinta roja en presencia de la dirección de esas galerías, situadas en el centro de París y a pocos metros de las también ilustres Lafayette.

Printemps calcula que cerca de 10 millones de personas pasarán en Navidades por la calle en la que se sitúan ambos establecimientos, el Boulevard Haussmann de la capital francesa.