La directora Isabel Coixet explicó ayer en Valencia que cuando una mujer se dedica al cine "las dificultades no se pueden contabilizar, no suelen ser cosas tan concretas como las que denuncia la campaña Me too". "Para mí, la dificultad es tener que probar una y otra vez, mil veces, que valgo, que sé lo que hago, tener que insistir", lamentó.

Así se pronunció la reciente ganadora del Goya a mejor dirección por La Librería durante el encuentro Cine y vida, una conversación conducida por la periodista María Guerra y organizada por la Fundación Cañada Blach, que completó el aforo del Centre del Carme Cultura Contemporània. "Como mujeres, tenemos que repetir las cosas muchas veces", lamentó, antes de recalcar que "sobre todo pasa si los equipos son de hombres". "Hay un momento en que al final me sale fuera un dragón ahí", confesó.

Por otra parte, Coixet admitió que tomarse fotografías o algunos aspectos de los grandes eventos son para ella una "obligación". "La dictadura de la alfombra roja nunca la entenderé, por mucho que me la expliquen", confesó. Preguntada sobre sus favoritas para los Óscar, destacó "la banda sonora, la actriz y la fotografía" de La Forma del Agua, de Guillermo del Toro, le ha gustado, y Lady Bird, de Greta Gerwig, como una "película muy bonita".