El descolgamiento del pecho es uno de lo motivos principales de consulta en las clínicas de cirugía estética. Aunque cada caso viene predeterminado por las circunstancias personales de la mujer, puede decir que es avanzada la treintena cuando comienza un periodo de caída y flacidez en la mama.

Este proceso se acelera, como es lógico, por la fuerza de la gravedad y el peso de los senos: a mayor volumen, mayor caída. Lógico según las leyes de Newton y lógico si tenemos en cuenta que el pecho femenino posee escasa sujeción natural. Esta función se puede atribuir a sus ligamentos suspensorios y a los músculos pectorales situados debajo, ya que su composición es en un 90% grasa.

Según los expertos consultados, sujeción 24 horas, deporte, hidratación y buenas posturas son las base de una buena guía de prevención. Toma nota de sus cinco consejos para evitarla:

1. Realiza ejercicios diarios para favorecer los músculos pectorales.

Son sencillos, pueden realizar en casa y no necesitas más que unas pequeñas pesas, aunque si no las tienes puedes sustituirlas por botellas de agua u otro elemento que haga las veces de peso. Un ejemplo de estos ejercicios para tonificar y fortalecer consiste en tumbarte boca arriba en el suelo con las rodillas flexionadas y , sujetando las pesas, abrir y cerrar los brazos sin tocar con el codo en el piso.

2. Sujeción 24 horas mediante dispositivos diseñados para evitar la caída y la aparición de las arrugas.

Lo ultimísimo es Pillow Bra, un sujetador pensado también para dormir y para practicar deporte sin incomodidades ni rozaduras.

3. Mantén una buena higiene postural.

Según el Quiropráctico Ata Pouramini, se trata de mantener la espalda recta, con los hombros también rectos y la silla cerca de la mesa, si estás sentado. En el caso de ir caminando, mantén la misma posición erguida, evitando desequilibrios en las caderas. Tu actitud, además de elegante, afirma el experto, te dará aspecto de poder y firmeza.

4. El agua fría es un buen cosmético natural, que activa la circulación. Un masaje de un par de minutos en círculos sobre el pecho potenciará la elasticidad.

5. Si das el pecho a tu hijo, siéntate y mantén la espalda recostada en el asiento. Pon al niño con la cabeza en apoyada sobre un cojín.