El 54 por ciento de los trabajadores españoles padece sobrepeso, el 32,5 por ciento pérdidas auditivas y el 13,5 por ciento colesterol alto, según se desprende de un estudio de Prevención Fremap en el que se han analizado los 812.000 reconocimientos médicos realizados en 2014 a trabajadores de todos los sectores económicos.

De todos los chequeos, el 85 por ciento fueron de tipo periódico, un 11 por ciento por inicio del empleo, un 1,1 por ciento por embarazo, un 0,6 por ciento por retorno al trabajo tras una baja y un 0,1 por ciento por un cambio de puesto que exigía una revisión de las aptitudes físicas. Los reconocimientos médicos suelen incluir pruebas como análisis de sangre y orina, electro cardiogramas, espirometrías, audiometrías, control de la visión y de la tensión arterial.

"Nosotros nos dedicamos a hacer reconocimientos médicos y hacemos todos los años un análisis de los datos obtenidos para sacar conclusiones sobre datos de salud general y también relacionados con el trabajo. Además, a través de los resultados proponemos a las empresas hacer campañas para mejorar hábitos de vida y conseguir una mejora la salud de los trabajadores", ha aseverado a Europa Press el director del área de Medicina de Trabajo de la Sociedad de Prevención de Fremap, José Manuel Gómez López.

La patología más prevalente entre los empleados en España es el sobrepeso, afectando más a los hombres (62%) que a las mujeres (31%). Asimismo, el peso más frecuente entre la población trabajadora masculina está entre los 77 y 85 kilogramos (un 47% del total). En las mujeres, el 27 por ciento tiene unos 62 kilos, el 22 por ciento unos 70 kilos y el 20 por ciento se sitúa en torno a los 55 kilos.

En cuanto a las 702.990 audiometrías realizadas durante el pasado año, el 32,58 por ciento dieron un resultado anormal en la exploración, lo que significa que esas personas han tenido una pérdida auditiva. "El resultado nos confirma que muchos trabajadores presentan deficiencias de audición en alguno o en ambos oídos causadas, probablemente en este último caso, por estar sometidos a un ruido excesivo en su puesto de trabajo", ha explicado Gómez López.

Hipercolesterolemia: Un problema de salud pública

Uno de los aspectos que más preocupan a los profesionales es la hipercolesterolemia, la cual se detectó en el 13,5 por ciento de los empleados españoles. Y es que, tal y como ha recordado el experto, un excesivo nivel del colesterol en la sangre conlleva un riesgo coronario alto.

"De todos los datos recogidos en estos reconocimientos médicos, la hipercolesterolemia es el hallazgo más llamativo, porque es un problema de salud pública y puede ser intervenido desde el trabajo", ha argumentado el doctor, quien ha aseverado que otro de los factores destacados en el estudio son las alteraciones en la visión.

En este punto, los resultados muestran que un 22 por ciento de los trabajadores tenían problemas de visión como, por ejemplo, presbicia, astigmatismo o miopía, y un 3,47 por ciento visión cromática anormal. Asimismo, y a pesar de que el 52 por ciento de los analizados tenían la agudeza visual corregida, un 73 por ciento usaba gafas, un 15 por ciento lentes progresivas y un 10 por ciento lentillas.

Uno de los aspectos positivos detectados en el estudio es la disminución del consumo de trabajo. Y es que, mientras que en el año 2012 fumaba un 32,5 por ciento, en 2013 este porcentaje descendió al 31,5 por ciento y en 2014 al 30,9 por ciento, lo que supone que en dos años ha disminuido un 5,2 por ciento el número de empleados que fuman habitualmente.

Entre los fumadores, el 32,5 por ciento eran hombres y el 28 por ciento mujeres. "Disminuye el número de fumadores cada año. Esto, y el resto de resultados, va a acorde a los resultados obtenidos en las encuestas de la salud de la población general realizada por organismos públicos como el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad", ha apostillado Gómez López.

Recomendaciones realizadas

Por otra parte, del trabajo se desprende también las recomendaciones que, a raíz de los 812.000 reconocimientos realizados, los profesionales sanitarios hicieron a los trabajadores sobre hábitos de vida saludables.

Así, los principales consejos se enfocaron en reducir la ingesta de grasas de origen animal (19%), disminuir el peso (14%), no fumar (14%), realizar controles de la agudeza visual (8%), controlar la presión arterial (7%) e incrementar el ejercicio físico (5%).

"El control del colesterol, del azúcar, de la tensión arterial y de la obesidad son problemas que podemos afrontar porque tienen la ventaja de que, al ser gente que periódicamente pasa por manos de nuestros servicios médicos, se les puede hacer un seguimiento y mantener un mensaje constante para mejorar esos hábitos", ha explicado el doctor.

Otras de las recomendaciones más importantes aportadas por los profesionales sanitarios fueron la necesidad de beber entre 2 y 2,5 litros de líquidos al día; reducir el consumo de hidratos de carbono; hacer ejercicios de mantenimiento; caminar 30 minutos diariamente; reducir la ingesta de sal, productos salados y conservantes; tomar más alimentos ricos en fibra; o actualizar la vacunación antitetánica.

"No estamos añadiendo un coste a lo que se está haciendo sino que en el mismo acto médico estamos haciendo una educación sanitaria a los trabajadores", ha zanjado el director del área de Medicina de Trabajo de la Sociedad de Prevención de Fremap.