Francisco Menéndez-Graíño, elegido recientemente presidente de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica, ha aceptado el desafío de valorar como profesional los cambios estéticos de las estrellas de cine al tiempo que habla de los últimos adelantos. Empezamos por...

-Robert Redford tiene 77 años. Afirmar que está operado es complicado, máxime cuando el mismo actor lo ha negado. Si no lo supiéramos, pensaríamos que le han hecho algún estiramiento de cara (lifting) pero ya hace tiempo, dado el gran número de arrugas que presenta. Confirmaría nuestra opinión el aspecto del lóbulo de las orejas, aunque curiosamente en internet no hay buenos planos laterales de su cara. Más evidente parece la cirugía de los párpados superiores, con unos pliegues muy marcados. En conjunto, quizá, da la sensación de unas mejillas bastante tensas frente a unos párpados inferiores, patas de gallo y área del mentón que no parecen tratados. Nos da la sensación de una dismorfia, algo incompleto, a medias o quizá no tratado desde hace bastantes años. No me parece ni error del cirujano ni peaje de la cirugía, sino quizás un tratamiento incompleto en un paciente que es varón (piel muy pesada y gruesa), pelirrojo y lleno de pecas, vamos lo opuesto a una piel ideal. Para que se dé una idea, Berlusconi sería el extremo opuesto: un tratamiento excesivo.

-Michelle Pfeiffer.

Parece que tiene un lifting frontal, la cola de las cejas está subida y la frente lisa (puede obtenerse algo parecido con el botox). Está operada de párpados (blefaroplastia). Y luego tiene rellenos los surcos nasogenianos, que se puede hacer con grasa o con productos tipo el acido hialurónico o hidroxiapatita.

­-¿La mastectomía preventiva de Angelina Jolie es buen ejemplo?

Me parece bien que si se ha hecho una mastectomía no lo oculte. Está ayudando a otras mujeres que se van a someter a un procedimiento similar y que probablemente están preocupadas. Está quitando leña al fuego. La mastectomía preventiva se viene haciendo desde hace más de 40 años. Yo mismo tengo pacientes operadas y reconstruidas desde hace más de 25 años. Es algo rutinario y habitual. Lo importante es que esté indicada. Angelina Jolie tenía una madre con cáncer de mama y unos estudios analíticos y genéticos que aconsejaron la cirugía. Solamente un antecedente familiar directo no es indicación de mastectomía. Hace falta más. Pensemos además que la mastectomía profiláctica no está exenta de riesgos y complicaciones.

-¿Su actriz favorita se operó?

No soy mitómano, pero citaré a dos, Charlize Theron y Scarlett Johansson. Charlize, para mí, al menos se ha operado la nariz, el labio superior parece engrosado y se ha aumentado las mamas. En cuanto a Scarlett Johansson me parece evidente que se operó la nariz. Las dos, pues, me parece que están operadas. Bien operadas. Ahora bien, por muchas cirugías que se hicieran, si no nos transmitieran, no tuvieran esa sonrisa, esa mirada, su expresión, no serían bellas. Podrían ser perfectas, pero no bellas. Y es que, creo, la belleza no sólo es armonía y proporciones, sino algo más: lo podríamos llamar encanto, decirnos algo, o por qué no "alma".

­-He visto hace poco una película con Julie Christie, Lara en ‘Doctor Zhivago’, operada para quitarse años. No parecía ella.

Vamos a ver, Julie Christie tiene 72 años. Posiblemente se haya hecho un lifting de cuello y algún tratamiento láser o peeling en cara, pero no me parece muy operada. No es Lara, han pasado 48 años y era una película. Nunca será Lara, con cirugía estética y sin cirugía estética, Lara tenía 24 años. Pero su mirada, sus ojos son de Lara. Si tengo algo que objetar, es el vestuario y los tocados que lleva en las fotos actuales. Son ridículos.

-David Matlock, famoso por el reality ‘Dr. 90210’, operó a una paciente de nombre Verónica a la que aplicó el paquete ‘Mujer perfecta’ y luego se casó con ella. ¿De locos?

Matlock es ginecólogo, no cirujano plástico. Se anuncia con gran despliegue publicitario como especialista en liposucción y en rejuvenecimiento vaginal (inyectar un relleno en la pared de la vagina para que sea más estrecha). Su mujer, Verónica, que estaba algo rellenita, adelgazó y luego se liposuccionó diversas zonas del cuerpo, según nos lo cuentan en unos esquemas muy básicos colgados en internet, la verdad es que mejorando mucho. Ahora bien, de ahí a mujer perfecta hay un abismo. También sale en algún vídeo dando la mano a su marido mientras otro médico le pone botox. Romántico. Seamos serios: no hay paquete ‘Mujer Perfecta’. Es puro marketing. Es muy libre de casarse con ella, aunque no me parece buena idea mezclar conceptos.

-Cuando un actor o actriz se ha operado, ¿lo percibe en seguida?

Lo ideal sería que no se notara, que pasara desapercibido. Por desgracia, son personajes públicos, continuamente retratados, por lo que cualquier cambio, ya sea en la cara, nariz, mamas o cuerpo, por pequeño que sea, será notado y publicado en los medios de comunicación. No es que yo lo llegue a percibir. Es que ya antes de verla me lo han dicho. Es el tributo que pagan por estar siempre en los medios. Pensemos que, por ejemplo, si metemos en Google "Charlize Theron" salen más de 42 millones de referencias.

-Las estrellas de antes no se operaban para mantener una juventud falsa, ¿eran más sensatas?

No comparto la afirmación de sensatez ni la de juventud falsa. La cirugía estética es para gente normal y sensata; la insensatez es estar descontento con un rasgo, no aceptarlo y sufrirlo, vivir pasándolo mal, y no operarse pudiendo hacerlo. Las estrellas de antes no se operaban porque la medicina no había avanzado tanto, la anestesia era más peligrosa y las técnicas quirúrgicas no eran tan depuradas. Creo que si vivieran ahora se operarían lo mismo que las estrellas actuales. Por cierto, no debemos de confundir la estrella con la "famosilla". La estrella se opera e intenta pasar desapercibida, no aparecer en público hasta que está recuperada, la "famosilla" va al cirujano y pacta un reportaje saliendo con vendajes de la clínica a cambio de una cirugía gratuita.

-Glúteos, pechos y lifting es lo más demandado por los famosos, según los cirujanos del gremio, ¿coincide con la gente común?

Realmente no sé hasta qué punto es cierta esa afirmación. Es relativamente habitual que una clínica o sociedad convoque una rueda de prensa para facilitar unas estadísticas que o no existen o están manipuladas. Si me preguntaran a mí qué cirugías me parecen más habituales entre famosos les diría que exactamente las mismas que el resto de la población; aunque esta distribución cambiará al estudiar el sector de famosos que se ven en la televisión, dado que su edad media es alta, con lo que sí es más frecuente que se hagan lifting. En resumen, creo que la demanda de una determinada cirugía depende más de la edad que de la fama.

-¿La mejor cirugía no se nota?

Es una afirmación que siempre he escuchado y defendido. Una paciente está bien operada cuando no se nota que está operada, se ve como natural no artificial. Y la mayoría de los pacientes lo ve también así, aunque ocasionalmente algún paciente quiere que se note que está operado. No lo comparto.

-¿Se puede llegar a ser adicto a los retoques?

Desgraciadamente, sí. Son pacientes que nunca están satisfechas con su cuerpo, que quieren mejorar más, que no quieren envejecer. Y lo pasan mal, muy mal. Y es complicado tratarlas. Se han operado contigo varias veces, y cuando ves que no está indicada otra cirugía y se lo dices, van a otro compañero. Y luego vuelven. La gente debe acudir a la cirugía estética para mejorar algún rasgo o característica que no le gusta, para recuperar el aspecto de la mirada, de la cara, del cuerpo…, pero como medio para verse mejor y olvidarse luego de esa cirugía y ser feliz.

-¿Un cambio exterior puede mejorar la autoestima o empeorarla?

Es curioso, pero muchas veces nuestra autoestima depende de pequeños detalles. No somos como nos ven, sino como nos vemos. Por ello, muchas veces, una pequeña cirugía puede mejorar la autoestima, y aquella chica tímida que no se relacionaba y estaba encerrada en casa pasa de patito feo a cisne y habla con todo el mundo, se siente segura y hasta baja en ocasiones el rendimiento escolar porque no para en casa (se lo advierto antes de la cirugía para que no ocurra). Por desgracia, a veces, una cirugía estética puede ser perjudicial, no porque esté mal realizada, sino porque las expectativas que había depositado en ella la paciente sean excesivas, irreales, y al no alcanzarlas empeora, se hunde; por ello es fundamental hablar con las pacientes y conocerlas para no operarlas si vemos que sus expectativas son irreales. Por desgracia, no siempre lo descubrimos.

-¿Llegan pacientes pidiendo parecerse a determinada estrella?

Sí. Aunque no es habitual, en ocasiones te vienen con una foto de la nariz de una famosa o el cuerpo de una chica ‘playboy’. No se dan cuenta que esa nariz está en una cara, no su cara, y esas mamas en un tórax, no el suyo, que cada persona tiene una anatomía personal y que lo que en la foto es bonito en la paciente podría ser horroroso. Te puede orientar sobre los gustos, por ejemplo, volumen de las mamas, pero sólo eso.

-¿El botox ha pasado de moda?

No, qué va, al contrario. Ahora ya no se habla de él porque ha pasado a ser un procedimiento rutinario, normalizado, controlado y cada vez con más indicaciones. Cada vez se lo ponen más pacientes, pero también cada vez ponemos dosis más bajas. Y es que nos dimos cuenta de que las caras lisas, congeladas e inexpresivas no resultaban atractivas, todo el mundo recuerda la cara de Nicole Kildman hace unos diez años, por lo que preferimos poner menos cantidad y dejar algo de expresividad en los rostros, alguna arruga. Podemos afirmar que cada vez se usa más, pero con mejor criterio y más indicaciones.

­-¿De nada sirve embellecerse si luego no se lleva una vida saludable?

Una cirugía estética bien realizada es suficiente para mejorar y embellecer. Así, una nariz bien operada lo es para siempre, o unas orejas en soplillo tratadas lo son para toda la vida. Ahora bien, en cirugías antienvejecimiento o tras obesidad los resultados serán duraderos sólo si se cuidan y tienen una vida sana. Operarse y luego trasnochar o dormir poco, comer en exceso o mal, fumar o beber mucho implican que en un plazo relativamente corto se perderán los beneficios alcanzados con la cirugía. Por ejemplo, si me hago una liposucción y luego no cuido un poco la alimentación o llevo una vida sedentaria y no hago ejercicio, los resultados serán menos duraderos en el tiempo. Por cierto, no debemos de olvidar que muchas veces con un buen maquillaje se pueden hacer maravillas.

-¿Alguna vez ha dicho no a las peticiones de un paciente?

Es curioso, pero con los años vas aprendiendo a decir no. Así, por ejemplo, cuando un paciente acude a la consulta con unas expectativas de resultados exageradas, muy superiores a las reales, o cuando está solicitando cirugías que no encajan con su físico o pueden perjudicar su salud (como prótesis de mama de grandes volúmenes en mujeres) es mejor no operarlo. Son pacientes que estarán siempre insatisfechos, dado que no se han cumplido sus expectativas o (en el caso de las prótesis) que en un plazo más o menos breve se le van a caer las mamas y tendrán problemas en la columna. Un paciente normal es el que se opera simplemente porque quiere verse mejor. Si quiere parecerse a un famoso o famosa, o recuperar a una esposa o marido que se ha ido con otro u otra más joven, no me parece indicado operar.

-Las caras internas de los muslos que no se juntan (the thigh gap) es la última moda.

Las caras internas de los muslos habitualmente acumulan algo de grasa y están abombadas, se juntan. Un muslo muy abultado estéticamente no es bonito. Por eso, desde que empezó la liposucción, hace más de 30 años, es habitual tratar ese acumulo buscando que el muslo en la cara interna descienda recto, no convexo. Hace un año, en el desfile de otoño de la firma de ropa Victoria's Secret, en New York, algunas de las modelos, al desfilar, mostraban las caras internas de los muslos no abultadas ni rectas, sino algo cóncavas, hundidas, deprimidas, como paréntesis entre las piernas, ¿realmente es bonito ese muslo? Creo que no. Me parece que es exagerado, una moda que durará un tiempo y luego pasará. Pudiera pensarse que es sinónimo de juventud, pero más bien lo es de delgadez patológica o, por qué no, de liposucción excesiva.

-Medicación local inyectada para destruir depósitos muy localizados de grasa, ¿es lo másavanzado?

No. Se lleva trabajando en una medicación para "disolver" la grasa desde hace muchos años, estando comercializada en España desde hace más de 4 años. El problema es que esta medicación, que se pone con inyecciones en las áreas grasas que queremos destruir, sólo es útil para acúmulos pequeños y muy localizados, con lo que, a día de hoy, tiene muy pocas indicaciones clínicas.