Samsung y Sony han hecho hoy alarde de su potencia tecnológica en Berlín, donde han mostrado los "phablets" Galaxy Note 4 y Note Edge, el casco de realidad virtual Gear VR, los móviles Z3 y Z3 Compact, así como sendos relojes inteligentes.

Tanto la firma surcoreana como la japonesa han acudido a la capital alemana a demostrar que siguen siendo capaces de innovar en la competitiva gama más alta de los dispositivos móviles, pero también de que no tienen miedo de probar suerte en nuevos campos, como la realidad virtual o los dispositivos corporales.

Una lucha de gigantes que, a falta de dos días de que empiece oficialmente la IFA de Berlín, han dado entidad a esta feria que ya brilla más por la movilidad que por la tradicional electrónica de consumo.

Samsung ha renovado su "phablet" -una categoría que inventó- y ha mostrado Note 4, con pantalla de 5,7 pulgadas, resolución 2.560x1.440 píxeles y marco de aluminio.

Cuenta con sensor de huella dactilar, cámara trasera de 16 megapíxeles y delantera de 3,7 mpx que permite tomar fotos con ángulo de hasta 90 grados. Pesa 176 gramos, mide 8,5 mm de grosor y se comercializará en blanco, negro, rosa y dorado.

Junto a Note 4 ha visto la luz Note Edge, que comparte interior con el anterior pero destaca por una pantalla curvada de 2.560x1.600 píxeles de resolución.

La curva de Note Edge cobra vida en el lateral derecho del dispositivo, donde añade nuevas funciones táctiles autónomas con respecto al resto de la pantalla.

También ha enseñado Samsung Gear VR, el esperado casco de realidad virtual, que utiliza la tecnología de Oculus VR pero funciona conjugado con el Note 4.

Por su parte, Sony ha presentado sus nuevos teléfonos de gama alta, Xperia Z3 y Xperia Z3 Compact, así como una tableta de ocho pulgadas

La tecnológica nipona ha acudido a Berlín con un catálogo de productos de gama alta renovado que da una vuelta de tuerca al diseño, los hace más compactos e introduce nuevos colores.

El nuevo buque insignia de Sony Mobile, el Xperia Z3, cambia ligeramente su diseño, mejora el sensor de imagen y promete optimizar el consumo de batería hasta los dos días. Es ligeramente más pequeño que su predecesor Z2, más delgado y más ligero.

Destaca su nuevo sensor de imagen, más compacto y que permite una ISO de 12800, lo que mejorará la captura de imágenes en condiciones de baja luminosidad. Además, llegará en un nuevo color, el bronce, que se añade a los clásicos blanco y negro.

El hermano pequeño de la gama Xperia, el Z3 Compact, crece en pantalla -que no en tamaño- hasta las 4,6 pulgadas y se hace más fino (de 9,5 a 8,65 milímetros) y más delgado (126 gramos frente a los 137 del predecesor). Z3 Compact llegará al mercado en otoño en banco, negro, naranja y verde.

Llamativo es el cambio de Sony en el apartado de tabletas: completa su gama introduciendo un dispositivo, el Z3 Tablet Compact, de 8 pulgadas.

Un elemento importante en todos estas tres nuevas propuestas es que pueden convertirse en pantallas de PlayStation alternativas a la televisión gracias a la función Remote Play.

La tecnología vestible va a ser sin duda una de las bazas de esta IFA, una categoría cada vez más nutrida de dispositivos.

Samsung ha mostrado el Gear S, un dispositivo de pantalla curva de dos pulgadas que trabaja con el sistema operativo Tizen.

Su característica más destacada es que tiene conectividad 3G, de manera que el usuario podrá recibir y contestar a llamadas y notificaciones aun estando alejado de un teléfono inteligente, al que puede asociarse mediante bluetooth.

Sony ha presentado en sociedad Smartband Talk, una pulsera de tinta electrónica que responde a comandos de voz, y SmartWatch 3, un reloj de pantalla cuadrada equipado con Android Wear.

Y también Asus se ha subido en Berlín al carro de los "wearables" con ZenWatch, un reloj rectangular con Android Wear diseñado para interactuar con un teléfono móvil inteligente y sobre cuya pantalla hay una capa protectora curva de cristal.