El HTC 10 es el nuevo teléfono inteligente de alta gama de la compañía tecnológica taiwanesa HTC, con el que pretende reforzar su posición renqueante en el competitivo mercado de la telefonía móvil con un terminal que ha mejorado sensiblemente sus cámaras.

HTC ha querido que la imagen sea el elemento más destacado de su nuevo teléfono estrella: sus cámaras trasera y frontal, de 12 y 5 megapixeles, cuentan con estabilizador de imagen y una apertura de f/1.8.

En el HTC 10, presentado hoy, la cámara trasera graba en 4K y va acompañada de un flash doble, mientras que la delantera captura vídeo en alta definición.

Según la compañía taiwanesa, el terminal es capaz de captar un 136 % más de luz que su predecesor (M9) y enfocar tres veces más rápido. Además, el teléfono lanza la cámara en 0,6 segundos.

Con cuerpo de metal, su pantalla LCD de 5,2 pulgadas tiene los bordes ligeramente curvados y una resolución de 2.560 x 1.440 píxeles (una densidad de 564 píxeles por pulgada).

En su interior hay un procesador Qualcomm Snapdragon 820, 4 gigas de RAM, una batería de 3.000 miliamperios por hora y dos configuraciones de memoria: 32 o 64 gigas, ampliables hasta 2 teras.

El terminal cuenta con un sensor de huella dactilar y HTC promete que también ha dado un salto en el ámbito de sonido: con reproducción en alta resolución, tres micrófonos y altavoces diferenciados para bajos y agudos.

Con el HTC 10, la firma tecnológica quiere resarcirse y volver a ganar terreno en el mercado de la telefonía: a su predecesor M9 no le fueron bien las cosas y, dada la saturación y la feroz competencia que se vive en la industria, algunos analistas cuestionaron su permanencia en ella.

Fuentes de HTC dijeron hoy en Madrid que la telefonía sigue constituyendo el negocio principal de la empresa, que cumple en este 2016 una década comercializando teléfonos bajo su marca propia.

Ahora, tendrá que demostrar con su último terminal estrella -que se pone a la venta esta primavera en colores gris oscuro, plateado y dorado- que no es demasiado tarde para volver a ser un actor relevante en el sector.