Resulta que la ventana abierta no es una ventana, sino el corazón de una persona que, por extraño que parezca, no tiene corazón.

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Quizá uno comienza a madurar cuando descubre qué se han llevado de uno aquellos que se han ido.

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Creo que siempre estaré del lado del corredor nocturno avergonzado de su sobrepeso.

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Eres como todo lo que se inventa el traductor: irreal pero necesaria.

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Sólo la Naturaleza dispone de la ternura suficiente para enmascarar lo terrible.

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Ya vino el que sirve el vino el que sirve el vino el que sirve el vino....

(Bucle al estilo bíblico)

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Detuvieron al médico por un asunto de escupepacientes.

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Todo el mundo acarrea, cuando menos, el trauma infantil de haber tenido que abandonar ese trauma.

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Lo tienes muy fácil: si la noche te confunde, la tarde té con pastas.