Las aguas generalmente torrenciales de las cataratas del Niágara se han congelado, dejando una estampa invernal que no ha dejado indiferente ni a turistas, ni a usuarios de redes sociales, que han podido ver a través de la pantalla la majestuosidad del fenómeno capturado en fotografías.

La intensa ola de frío que azota el noroeste y el medio oeste en América del Norte, y que ha protagonizado fuertes nevadas durante la semana pasada, terminó por congelar las cataratas más emblemáticas del continente americano.

En Toronto, las temperaturas han llegado a bajar hasta los -24ºC, con sensación térmica durante la noche de -38ºC.

Con estas temperaturas muchos fueron los que se quedaron al resguardo del calor de su hogar, y otros tantos, los visitantes de las cataratas del Niágara, situadas entre Canadá y el estado de Nueva York, los que decidieron seguir con sus planes, abrigarse bien y dejarse sorprender por un espectáculo de grueso hielo y nieve