Carlos Faemino y Javier Cansado, una de las parejas de cómicos más veterana y aplaudida de España, vuelven a los teatros con su nuevo espectáculo, Parecido no es lo mismo, cuyo título, dicen, "no engaña". El dúo humorístico afirma que, en estos momentos de crisis, el teatro "actúa como un bálsamo" y que les sale más trabajo del que quieren.

-¿Preparémonos para la sonrisa o la carcajada?

-La sonrisa no va con nosotros, nos oponemos a ella radicalmente. El humor debe buscar la carcajada, que es revolucionaria, ácrata, primaria y burra. La carcajada de verdad te sacude de labutaca. Lo de la sonrisa y la carcajada es como lo del erotismo yla pornografía; sobra decir quenosotros nos quedamos con lapornografía.

-De la carcajada a la tristeza. ¿La televisión les deprime?

-Como espectadores nos da igual pero como artistas, como creadores, no nos gusta. La televisión fue un escaparate para Faemino y Cansado, y nos dio dinero, pero siempre trabajábamos en ella a regañadientes. El humorista no podía acceder a ningún sitio si no salía en la tele, por eso hicimos tele, pero nunca fuimos felices con ella. Siempre sentíamos la angustia de la cámara y la trascendencia del medio.

-Algo que no padecen en el escenario de un teatro.

-No, porque notamos el contacto con el público, algo que siempre hemos necesitado, desde los orígenes, cuando actuábamos en la calle, haciendo performances, o en el escaparate de unatienda de muebles de un amigonuestro.

-¿Añoran la calle?

-La calle es muy romántica y pura, pero hace frío y si llueve te mojas.

-¿El humor, como el teatro, se hace fuerte con las crisis?

-El humor es lo que menos prestigio da pero lo que más espectadores mueve. Y en tiempos de crisis funciona como un bálsamo, como una terapia. Desde hace tres años nos sale más trabajo del que queremos.

-¿El que sí está en crisis es su vestuario?

-Se puede decir que sí, porque en los últimos treinta años noshemos comprado solo tres chaquetas. Hace ya tiempo que siempre usamos las mismas en los espectáculos.

-Tres décadas después, ¿se siguen sorprendiendo el uno del otro?

-Nos gusta morcillear, reírnos en el escenario y somos tan tontos que a veces nos reímos de nosotros mismos. Siempre jugamos con la sorpresa y los cambios de planteamiento. Sorprendernos es algo necesario para nosotros.

-Sean sinceros, ¿nunca han pensado en una separación amistosa?

-No. Llevamos treinta años trabajando y ganando dinero perosomos amigos desde hace másde cuarenta años, colegas del barrio que crecieron juntos yendo al cine y tomando cañas. Jamás ha habido un problema entre nosotros dos.

-¿Existe algún placer superior a la risa?

-El sexo. Si pudiéramos reír mientras hacemos el amor sería lo máximo, pero eso solo lo consiguen, según dicen, algunos tibetanos. El humor es algo maravilloso, beneficioso para la salud, fundamental para la musculatura y sirve para hacernos mejores como personas.

-Rechacen etiquetas: ¿absurdos, surrealistas o inteligentes?

-Nos gustan las tres, aunque nos gusta decir que somos realistas surrealistas. Nuestros personajes son reconocibles, cercanos, pero nos gusta enfrentarlos a asuntos disparatados, en un contexto loco y exagerado.

-¿Se puede bromear con cualquier cosa?

-No conozco ningún tema del que no se pueda bromear. En nuestro país lo más habitual es el humor negro, reírse de la muerte, así que si haces humor de la vida, pues ahí entra todo: nacionalismos, política, lo que sea...

-¿Por qué los grandes pensadores, salvo Kierkegaard, lehan dedicado tan poco tiempo al humor?

-Porque no da renombre. El humor siempre ha sido algo desdeñado, pero aseguramos que reírse no es malo. Prueben y verán.