-¿La Constitución se muere?

-Si no se reforma acabará perdiendo su legitimidad de origen. Ha durado, surtió efectos positivos y nos dio los mejores años de la edad contemporánea de España pero, o se reforma, o acaba hundiéndose el edificio, como ya ocurrió en la primera Restauración. De la reforma de la de 1876 se estuvo hablando todo el primer tercio del siglo XX, no se hizo, y llegó 1931y se hundió.

-Ninguna constitución abordó la cuestión territorial.

-No se resolvió en sede constituyente sino de forma infraconstitucional, a través de los estatutos de autonomía. Pasó en el 31 y en el 78. Al no estar definida la estructura del Estado en la Constitución, se acaba siempre con recursos ante el Tribunal Constitucional, y así la Constitución salta por los aires.

-¿Por qué no se reforma?

-Por la composición de las Cortes Generales. Se buscó una desviación calculada del principio de igualdad en el Congreso y en el Senado y se utilizó para configurar el Parlamento la provincia, lo que lleva a una desviación porque el voto no tiene el mismo valor en todas las circunscripciones. Estaba pensado para que hubiera un bipartidismo turnante que garantizase la supervivencia de la Monarquía. En el Senado, la circunscripción provincial impide que el Estado pueda evolucionar hacia un Estado federal. Ese es el déficit de legitimidad de origen del Congreso y del Senado.

-¿El Senado debe suprimirse?

-El Senado tiene que desaparecer porque es anticonstitucional, un aborto, una negación del principio de igualdad, por tanto, anticonstitucional. Y hay que cambiar la composición del Congreso también.

-¿Cambiando la ley electoral?

-No solamente. Habría que configurar las Cortes de una manera totalmente distinta para que la sociedad española pudiera expresarse tal como es. Pero eso depende del Congreso y el Senado. La dificultad de la reforma es que los que tendrían que hacerla son los primeros en sufrirla.

-Sería hacerse el harakiri.

-Tendrían que configurarse de otro modo, y el Senado, desaparecer o ser un órgano a través del cual los territorios participaran en la construcción de la voluntad del Estado, que hoy no ocurre, y las comunidades autónomas son un subproducto, un apéndice.

-¿Y el encaje catalán?

- El encaje catalán exige la definición de la estructura del Estado en la Constitución.

-Llama "golpe de Estado judicial" a la sentencia del Constitucional contra el Estatut.

-Materialmente, lo es, porque se carga dos garantías de la Constitución: una autonomía no puede imponer al Estado un Estatuto con el que no esté de acuerdo, ni el Estado no puede imponerle a la autonomía un Estatuto que no quiera. Pero el Constitucional desautorizó el pacto entre el Parlament y el Congreso y quitó la última palabra en referéndum a los catalanes. Por eso no hay Constitución en Cataluña, porque no aceptan ese Estatuto. Lo que ocurre en Cataluña es una locura. Se está desintegrando el sistema político, el ordenamiento jurídico va hacia el caos, se hacen cosas que no se pueden hacer... El Parlamento no puede dar un sólo paso sin investir al jefe del Gobierno, y han declarado la independencia. Todo esto es monstruoso.

-¿Qué va a pasar?

-Sin Constitución, sólo hay desorden. La Constitución es la única que posibilita que todos los problemas se puedan solucionar de una forma jurídicamente ordenada.

-¿Atisba la independencia?

-Es un espejismo. El independentismo no tiene fuerza para alcanzar la independencia de Cataluña pero tiene tamaño suficiente para hacer ingobernable Cataluña y, por extensión, España. No se puede gobernar el país si no tienes presencia en Cataluña. Y en el País Vasco va a pasar lo mismo. España se ha gobernando estos años porque PP y PSOE tenían el 50% del voto en Cataluña y había un parentesco entre el sistema político español y el catalán, pero desde 2010 en todas las elecciones hay divorcio.

-¿Qué augura el 20-D?

-Vamos a tener problemas de gobierno porque esta Constitución está pensada para un sistema bipartidista. No desaparecerá pero tendrá una erosión fortísima.

-¿El Estado federal?

-Es un punto de partida. Se define la estructura del Estado y los elementos que se integran en él a través de un pacto constituyente. El Estado de las autonomías es un punto de llegada, no hay pacto, hay sólo una Constitución que posibilita el ejercicio de la autonomía. No tiene legitimidad, mientras que el federal, sí, y se somete al referendum de todos los ciudadanos.

-La cuestión es el pacto.

- Eso es lo que nunca se hizo en España, ni en 1931 ni en 1978.

-¿Vio el debate electoral?

-Sí, y me divertí bastante. El que más me gustó fue Iglesias, después Sánchez, y Rivera me defraudó. En la cuestión territorial sólo Ciudadanos puede decir lo que piensa.

-¿Cree que podrían pactar?

-El punto de partida para buscar una solución a Cataluña es el referéndum. Sin un referéndum, no hay salida, pero sólo Podemos lo defiende. Hay que ver qué ocurre en las elecciones y, sobre todo, ver cómo queda el PP de debilitado.

-Saltó del PSOE a Podemos.

-El PSOE no va a defender el referendum en Cataluña y yo coincido con Podemos.

-¿Por qué renunció a ir como número tres por Sevilla?

-Se lo expliqué a Iñigo Errejón y le dije que no diría ni una palabra.