Un tribunal da la razón a un agente que se negó a dar sus armas a uno de sus superiores

El Tribunal Militar Territorial número 4 de A Coruña falló a favor del guardia civil D.A.F.P., que se negó a entregar sus armas de fuego particulares al capitán de la Primera Compañía, que tiene su sede en la ciudad. El superior sancionó al guardia civil pese a que el agente se encontraba de baja psicológica y exento de cumplir sus órdenes. El tribunal recalca que ningún guardia civil fuera de servicio debe cumplir mandatos que no atañan directamente al servicio y que, como cualquier ciudadano, sólo puede disponer la entrega de sus armas un Juzgado competente, no sus superiores o el servicio de la Guardia Civil.

El agente pedirá una indemnización por daños y perjuicios, así como una disculpa por escrito del capitán que le solicitó sus armas de fuego. La sentencia emitida por el Tribunal Militar Territorial número 4 de A Coruña es novedosa en el ámbito militar y otorga la razón a la Unión de Guardias Civiles, una organización que trata de "separar el ámbito militar de la institución de la vida personal de los agentes". El fallo a favor del denunciante fue publicado en el último Boletín Oficial del Cuerpo de la Guardia Civil.