Los vecinos ganan el pleito contra la promotora del 'parking' de Mariñeiros

La Justicia ha dado la razón a los 63 vecinos que demandaron a la empresa constructora del parking de Os Mariñeiros, Urbaxe. Una sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 8 obliga a la promotora a entregar a los vecinos en propiedad las plazas que les vendió hace siete años, a pesar de que los cambios legislativos la hayan obligado a modificar el proyecto original. El juez ha entendido que "habida cuenta de que en la zona privada existen 169 plazas destinadas a la venta a particulares, no se observa imposibilidad física o legal sobrevenida que impida a la empresa Urbaxe otorgar a cada uno de los demandantes las plazas" que fueron objeto de los contratos firmados entre las partes.

La constructora trató de demostrar que la Lei de Ordenación Urbanística e Protección do Medio Rural de Galicia aprobada por la Xunta el 30 de diciembre de 2002 le obligó a modificar el proyecto de tal manera que las plazas de los demandantes nunca se llegaron a construir, pero el juez ha entendido que a los compradores no les había sido asignado un aparcamiento en concreto y que las plazas existentes son suficientes para que a cada uno de los demandantes, defendidos por los letrados Enrique Rodríguez González y Raúl García Suárez, les pueda ser entregada la suya. La ley influyó en la construcción proyectada porque prohibe la privatización del subsuelo en parcelas de titularidad pública, tal y como había pactado hacer Urbaxe con el Concello, propietario de terrenos en la calle Cangas do Morrazo y San Pedro de Visma bajo los que estaba previsto que discurriesen los aparcamientos.

También indica el fallo judicial que no puede entenderse que la reforma legislativa fuese algo imprevisible ya que, según el juez que ha redactado la sentencia, "es difícil pensar que una modificación de tal entidad le llegase por sorpresa".

Urbaxe argumentó en la vista oral que la aprobación de la ley supuso una "extraordinaria alteración" del proyecto, pero el magistrado indica que las plazas vendidas a los demandantes están ubicadas en una parcela que era propiedad de la promotora, por lo que la reforma legislativa no afectó de forma directa a esta parte del aparcamiento. También alegó la demandada que, pasados siete años, no podía vender las plazas al precio pactado en un principio, que oscilaba entre los 9.300 y los 9.900 euros, dependiendo del lugar de ubicación y dimensiones de la plaza.

Recuerda la sentencia que el propio perito contratado por Urbaxe dijo en el juicio que la venta de los aparcamientos al precio inicialmente pactado "no podía considerarse ruinoso para el vendedor", ya que aunque los beneficios serían menores de lo esperado, seguirían existiendo. El especialista calculó que el 17% de margen que le quedaba a la constructora se reduciría ahora un 11%, lo que la sentencia considera "un lucro cesante en absoluto exagerado". Los vecinos habían reclamado también, además de que las plazas les fuesen entregadas en propiedad por el precio pactado, que Urbaxe los indemnizase por los daños que el retraso en las obras les está produciendo. Sobre este extremo, el juez ha considerado que la demora está justificada por el cambio de normativa y la elaboración de nuevos proyectos para ajustar la obra a la legalidad vigente. La sentencia no es firme y contra ella cabe recurso de apelación.