El Ayuntamiento devolverá los módulos de Penamoa finalizado el plan de integración

La concejal de Servicios Sociales, Silvia Longueira, anunció en mayo que los módulos de convivencia para "educar" a los chabolistas de Penamoa serían utilizados como centros cívicos en otros barrios. "Los edificios están diseñados para otros usos en este municipio. Pueden funcionar como centros cívicos", aseguró Longueira, convencida de que el Ayuntamiento compraría las construcciones. El Concello, sin embargo, alquilará las estructuras diseñadas por Santiago Cirugeda a la empresa Algeco Construcciones Modulares SAU por 1.900 euros al mes, por lo que no las reutilizará.

El arquitecto encargado del proyecto de los módulos de convivencia, Santiago Cirugeda, destaca que los edificios prefabricados se pueden "trasladar a otros barrios" y que están dotados de "todos los equipamientos" necesarios para que los chabolistas aprendan normas de convivencia antes de realojarlos en viviendas. El Gobierno local anunció que pagaría por cada uno de los dos inmuebles, que tendrán 250 metros cuadrados de superficie, 100.000 euros. Finalmente, la Administración municipal alquilará las instalaciones por 1.900 euros mensuales y por un plazo máximo de quince meses, que es lo que dura el programa aprobado por Servicios Sociales para recolocar a los residentes en el asentamiento.

El Ayuntamiento pagará a la empresa adjudicataria del proyecto 68.097 euros, incluidos en una de las partidas que los presupuestos municipales destinan a la integración de los chabolistas. El transporte e instalación de las construcciones costará 39.672 euros, a los que hay que sumar los 28.425 euros que abonará el Ejecutivo local por la cesión de los edificios prefabricados.

Técnicos municipales enseñarán a los chabolistas hábitos sociales para que se adapten a la convivencia en los pisos en los que los recolocará la Concejalía de Servicios Sociales. Los residentes en el asentamiento, según el Gobierno local, aprenderán en los módulos "formación para el empleo" y "normas de convivencia ciudadana similares a las de cualquier comunidad de vecinos". Los módulos, según Cirugeda, funcionarán "como cualquier centro social de barrio".

El Ayuntamiento anunció que los chabolistas serían "educados" en las instalaciones diseñadas por Cirugeda antes de ser realojados en viviendas, pero el Concello ya recolocó a los residentes en el Poblado cuyas barracas impedían el inicio de la construcción del segundo tramo de la tercera ronda.

Servicios Sociales regaló madera a los vecinos del asentamiento a los que no adjudicó pisos para que construyesen chabolas en un lugar donde no impidiesen que avanzase la ejecución del vial, a escasos metros de donde se ubicaban las barracas que el Concello ordenó demoler. Los técnicos municipales aseguraron a los chabolistas que vivirían de forma provisional en las chabolas recién construidas, pero muchos de ellos afirman que su intención es quedarse a vivir en ellas.

La parte alta del poblado, donde se situarán los módulos, está casi desierta. Las máquinas derribaron la mayoría de las barracas y trabajan en la construcción de la tercera ronda. Los chabolistas que no fueron realojados esperan a que los técnicos les den una solución cuando necesiten tirar sus casas para seguir la construcción de la carretera.

El Ayuntamiento no hizo público el listado de chabolistas que serán "educados" en los módulos de convivencia antes de ser recolocados. Por el momento, los vecinos de Penamoa que ya fueron realojados no han tenido ningún problema con sus vecinos.