Condenado a 93 días de trabajos por amenazar a su familia con un cuchillo

Un hombre fue condenado ayer a 93 días de trabajos a favor de la comunidad por haber pegado al hijo de su mujer y perseguido a parte de la familia por la calle con un cuchillo de 33 centímetros de largo. El acusado y uno de los hijos de su pareja comenzaron a discutir en el salón de la vivienda donde residían después de que el chico le recriminase al procesado la actitud hacia su madre, pues vio como la empujaba e insultaba.

El hombre y el joven se tiraron sendas botellas de cerveza a la cabeza, se golpearon y se mordieron hasta que la mujer y el resto de sus hijos que convivían en el domicilio familiar mediaron en la discusión. El hijo de la mujer logró meterse en su cuarto, momento que aprovechó el imputado, representado por el letrado José Ramón Sierra, para hacerse con un cuchillo de cocina con el que trató de abrir la puerta del domicilio del chico, aunque sin conseguirlo. Atemorizados por la situación, el resto de la familia huyó escaleras abajo con la intención de refugiarse en un bar cercano a la vivienda.

Cuando el acusado se dirigía al establecimiento en el que se habían escondido su pareja y tres hijos de ésta, fue visto por un agente de la Guardia Civil fuera de servicio, quien le impidió al hombre la entrada en el local y avisó a la policía. La mujer y dos de sus hijos resultaron con heridas leves.

Los hechos tuvieron lugar el 3 de abril de 2007 y diez días después, la mujer renunció a cualquier indemnización que pudiese corresponderle y dijo que no le tenía miedo al hombre, pues era la primera vez que no se comportaba bien. También los hijos dijeron en declaraciones posteriores que no deseaban la orden de alejamiento. Como el imputado estuvo de acuerdo con la pena solicitada por el fiscal, el juicio no se celebró.