Pontedeume pide colaboración a los hosteleros para erradicar el 'botellón'

El Concello de Pontedeume ha solicitado la "colaboración" de todos los establecimientos hosteleros de la localidad para "erradicar" el botellón. El Gobierno local que preside Gabriel Torrente (PP) pone en marcha así la tercera fase del programa Botellón Cívico, que arrancó el pasado mes de mayo con una campaña de sensibilización.

El Ayuntamiento trabaja, en esta fase del plan, en el diseño de acciones formativas dirigidas a los estudiantes de tercer y cuarto curso de ESO y en la realización de talleres de "dinamización y participación social" que pretenden implicar a toda la comunidad educativa. Además, trata de consensuar acciones que impliquen al conjunto de la sociedad mediante la convocatoria de reuniones informativas y la creación de grupos de trabajo. Estas labores se desarrollarán hasta finales del presente curso escolar.

Para la concejala eumesa de Servizos Sociais, Ruth García (PP), el botellón no es únicamente un problema de civismo y respeto por los espacios compartidos, ya que el parque en el que se reúnen los jóvenes para beber alcohol -los jardines de Lombardero- es el lugar en el que horas después juegan los más pequeños, "sino también una cuestión de respeto por el descanso de los vecinos y, sobre todo, un problema de salud". "Todos conocemos el efecto que produce el consumo de alcohol y más aún en personas tan jóvenes, así como las repercusiones que tendrá en un futuro no lejano en la salud de quien lo consume", advierte García.

El Concello considera "fundamental" la implicación en este programa de "todos los colectivos" relacionados con la juventud y el consumo de alcohol, de ahí que se dirija a todos los establecimientos de hostelería y a aquellos que se dedican a la venta de bebidas alcohólicas para recordarles su responsabilidad y solicitar su colaboración para reducir el fenómeno del botellón "e incluso erradicarlo". Para la responsable municipal de Servizos Sociais, que apuesta por el diálogo y la negociación entre las partes implicadas como única fórmula válida a la hora de tratar de solucionar este problema, "todos somos responsables y todos somos útiles a la hora de paliar este fenómeno social".

El proyecto Botellón Cívico arrancó el pasado mes de mayo con una campaña de impacto y la búsqueda de métodos para tratar de minimizar los efectos del botellón. Servizos Sociais recogió información e inició una campaña de distribución de carteles, pegatinas y folletos. En una segunda fase, en verano ya, se organizaron actividades con los jóvenes, entre ellas una yincana nocturna.