La Guardia Civil ha detenido a cinco jóvenes más por su supuesta relación con la agresión sufrida por un policía local de Sada el pasado 16 de mayo, con lo que ya son siete los arrestados. Los sospechosos permanecen en las dependencias del instituto armado y está previsto que en las próximas horas pasen a disposición judicial.

El agente agredido presentará una denuncia ante el juzgado de Betanzos por lo sucedido en la discoteca Manao sobre las cinco de la la madrugada del pasado sábado16 de mayo. El policía local asegura que entró en la sala de fiestas Manao con un amigo, pero que estaba solo cuando se le aproximó un grupo de jóvenes.

Uno de ellos le preguntó si se acordaba de su cara, ya que con anterioridad le había puesto una multa. A continuación, según la versión del agente local, le golpearon desde atrás y a consecuencia del golpe, quedó semiconsciente.

La víctima sostiene que al salir del pub se formó un tumulto a su alrededor y que comenzaron a insultarle y a darle patadas. Según su testimonio, nadie pudo prestarle ayuda porque se encontraba rodeado, por lo que llegó a temer por su integridad física.

Al llegar la policía, los jóvenes dejaron de pegarle, pero el agente asegura que los señaló diciendo que eran ellos los que le habían propinado la paliza. Este hecho molestó a los agresores y volvieron a golpearle delante de los agentes. La víctima fue trasladada hasta el Punto de Atención Continuada de Sada, donde dada la gravedad de sus heridas, lo remitieron al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, donde permanece ingresado a la espera de ser intervenido de una fractura en un pómulo. Según fuentes de la investigación, le quedarán secuelas de la paliza, entre ellas la pérdida de audición.

La Guardia Civil de Sada detuvo el mismo día de los hechos a dos de los supuestos agresores, que tras prestar declaración en el juzgado de Betanzos, quedaron en libertad con cargos, acusados de un delito de lesiones y de otro de atentado a la autoridad.

Según informó el instituto armado, las versiones ofrecidas por los dos jóvenes y las de varios testigos difieren, ya que unas apuntan a que el agente fue agredido y otras a que fue él quien asestó un cabezazo a uno de los dos arrestados. El detenido que asegura haber sido golpeado por el policía local también recibió asistencia médica por unas lesiones que el personal facultativo calificó de leves. La investigación es llevada por la Guardia Civil de Sada, aunque la familia ha pedido que no sea así dada la mala relación existente entre algunos miembros del instituto armado y de la Policía Local.