En Europa las cosas se hacen de manera distinta a Estados Unidos a la hora de hacer cómics. El público europeo también es distinto al estadounidense ya que no suele leer el cómic por el personaje, lo lee por el autor, y éstos se pasean entre las diferentes opciones editoriales. En estos cómics de autor, cada personaje está atado a quien lo realiza y, durante todo el mes, el público coruñés permanecerá atado a las historias de dos grandes de la historieta: André Juillard y Scott McCloud.

El caso de McCloud, natural del país del dólar, es muy importante ya que se trata de un dibujante muy europeizado, con una visión profunda de la autoría. "El mundo del cómic", comenta el estadounidense, "está sufriendo muchos cambios pero nunca afectarán al tradicional soporte del género". McCloud, uno de los grandes teóricos del cómic, cree que la aparición de internet "lo único que ha logrado es darle más importante al soporte físico".

En la misma línea que el autor de Entender el cómic, el dibujante francés André Juillard defiende el ambiente "mágico" que rodea todo lo que tiene que ver con la creación del cómic. "Los lápices, el papel, la tinta y el propio dibujo no se pueden concebir en una pantalla de ordenador", argumenta Juillard.

Sobre la posibilidad de que el cómic abandone las historias de aventuras y de fantasía para centrarse en una temática más social, McCloud lo tiene claro. "El cómic social existe. En Estados Unidos está Joe Sacco que publica trabajos sobre la problemática en Oriente Próximo y es una herramienta muy útil para aproximarse a la actualidad", considera el teórico más importante del género. Para Juillard el cambio hacia unas historietas más apegadas a la actualidad "se produce en los años setenta con artistas como Robert Cramp".

Tanto el autor francés como el estadounidense se refieren a la calidad que está mostrando el género en los últimos años al afirmar que "la gente nueva aporta cosas que motivan a los veteranos". Gracias a ese impulso, McCloud aparcará el aspecto más teórico del cómic para editar una nueva historia de la que espera, entre risas, que "después de tantos años de teoría no sea muy analizada por el público".

Juillard mostrará hasta finales de mes una recopilación de sus mejores trabajos de los años 80 en el Kiosco Alfonso, mientras que el estadounidense expone en el Palacio Municipal distintos originales y bocetos de sus series sobre la teoría del cómic. Ambos dibujantes se muestran muy contentos de participar en la duodécima edición del festival Viñetas desde o Atlántico y alaban la labor de su director, Miguelanxo Prado. "Es un festival muy tranquilo, en el que importa más lo humano que lo comercial", asegura Juillard mientras dibuja a una nueva mujer de autor.