La propuesta del Ayuntamiento coruñés de que la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas asumiese la mitad del coste previsto en las expropiaciones necesarias para el enlace de la tercera ronda en As Rañas, calculado en 1,8 millones de euros, recibió el rechazo frontal de este departamento autonómico, ya que ese tramo de carretera será de titularidad municipal. La diferencia surgida entre ambas administraciones puede derivar en una nueva demora en la ejecución de esta vía, que ya soporta un considerable retraso con respecto a las previsiones iniciales para su conclusión, en ocasiones a causa de las disputas sobre la disponibilidad de los terrenos, el proceso de expropiaciones o el diseño de los proyectos en los tramos.

El conselleiro, Agustín Hernández, respondió a la carta enviada por el alcalde, Javier Losada, a mediados de marzo que la tercera ronda "no se va a integrar en las vías de titularidad autonómica", de forma que, en su opinión, "el coste íntegro de las expropiaciones deberá correr a cargo del Concello, tal y como se realizó en los tramos anteriores".

La respuesta de Hernández fue desvelada por Unión Coruñesa, que acusa a ambas partes de actuar con "irresponsabilidad" al utilizar las obras de la tercera ronda "como arma arrojadiza de marcado carácter electoralista", al tiempo que considera que la decisión de la Xunta "deja en punto muerto" la conclusión de esta carretera.

El regidor coruñés había planteado al titular de Infraestruturas que la administración gallega acometiese el proceso de adquisición de los terrenos y que, posteriormente, el Ayuntamiento entregase 1,8 millones de euros durante los años 2011 y 2012, ya que calculaba que esa cantidad sería la mitad del coste de las expropiaciones necesarias.

En la misma misiva, Losada explicaba al conselleiro la imposibilidad de que el Concello asumiese en solitario el abono del precio de los terrenos, puesto que la Xunta envió el proyecto del enlace cuando ya había sido aprobado el presupuesto municipal de este año, por lo que no pudo hacerse la reserva de fondos necesaria.

La carta del alcalde respondía a su vez a la propuesta de convenio que había sido efectuada con anterioridad por Hernández para llevar a cabo la conexión entre los tramos autonómico y estatal de la tercera ronda. En esa oferta, se planteaba que el Concello facilitase a la Xunta los terrenos antes de que se licitasen los trabajos, para lo que sería imprescindible que antes se demolieran todas las edificaciones de la zona afectadas por las obras.

La consellería propuso además acelerar el inicio de la infraestructura mediante su compromiso de hacerse cargo de la reinstalación de los servicios de abastecimiento de agua, telefonía, gas y saneamiento afectadas, así como del coste de las demoliciones, en lo que pensaba invertir 145.000 euros. Al Ayuntamiento le correspondería reponer las líneas eléctricas y las de R, lo que le supondría un coste de 316.000 euros.

En la carta enviada por Hernández a Losada el 22 de marzo, el conselleiro le informó de que los técnicos de la consellería estudian en estos momentos su propuesta de que se modifique el proyecto previsto para As Rañas, de forma que se construya un falso túnel que evite las demoliciones de viviendas que plantea la solución actual. Esta iniciativa surge de la petición efectuada por los vecinos de la zona, quienes consideran además que el nuevo vial dividirá en dos el núcleo de población existente.

El alcalde explicó al responsable de Infraestruturas que las alternativas formuladas por el Concello para los tramos de San Pedro de Visma y San Cristóbal das Viñas podrían ser empleadas también en este caso, ya que serían más respetuosas con el entorno y las edificaciones existentes y permitirían también un ahorro en los costes de las expropiaciones.

La conexión tendrá una longitud de 70 metros y unirá los dos sectores de la tercera ronda, así como la carretera hacia el polígono de Vío. El proyecto prevé un cruce con dos niveles, del que el primero será el del tramo construido por la Xunta y que tendrá características de autovía, con dos carriles en cada sentido y una calzada con una anchura de 28 metros. El segundo nivel serán los ramales de la vía construida por el Ministerio de Fomento, que pasarán bajo el tronco principal del enlace, con dos carriles y una anchura de 10,5 metros.