El Gobierno local no tiene entre sus prioridades la construcción del albergue juvenil propuesto por la concejal de Juventud y Normalización Lingüística, Ermitas Valencia, y ha decidido aparcar el proyecto sin fecha concreta.

Los planes de la edil nacionalista pasaban por contratar el proyecto este año con cargo al nuevo fondo estatal para el estímulo de las economías locales. Sin embargo, el albergue no fue finalmente incluido entre las obras para las que el Ayuntamiento solicitó financiación al Estado.

Esta decisión ha supuesto un frenazo a los planes de la Concejalía de Juventud y Normalización Lingüística, que con el albergue pretendía entrar en la red europea para este tipo de alojamientos, lo que a la vez iría acompañado de ayudas económicas comunitarias. El problema consiste en que para obtener esos fondos es imprescindible antes contar con una residencia dedicada en exclusiva a los más jóvenes.

Las esperanzas de la concejalía pasan ahora por lograr que el Gobierno local autorice la construcción del albergue a través de los próximos presupuestos municipales, los correspondientes al año 2011. Esta posibilidad, sin embargo, parece todavía lejana.

En Juventud y Normalización Lingüística no poseen demasiadas esperanzas en conseguir que el Ayuntamiento financie por completo el año que viene una infraestructura que este mismo tenía la posibilidad de compartir con el Estado y para la que incluso ya tenía preparados unos planos y elegido un lugar en el que construir toda la instalación.

Inicialmente, la ubicación del albergue estaba prevista en la zona de Matogrande y su papel no se reservaría en exclusiva a ofrecer un alojamiento asequible a jóvenes de paso y estudiantes, como en un primer momento indicó Ermitas Valencia. La concejalía decidió ampliar la oferta de esta infraestructura de manera que también viniera a cubrir las funciones de un hostel y no se reservase en exclusiva para los más jóvenes.

La construcción del albergue también vendría a cubrir las necesidades existentes ya no solo en la ciudad, sino también en toda la provincia. Actualmente, en A Coruña, tan solo existen dos alojamientos de características similares a las que propone la concejalía de Ermitas Valencia y ambos son gestionados por la administración autonómica.

Uno de ellos se encuentra en la localidad de Gandarío, en el municipio de Bergondo, y el otro es el que funciona en el Monte do Gozo, en las afueras de Santiago de Compostela. A pesar de estas carencias, el Ayuntamiento no considera que la construcción de esta instalación sea una prioridad en estos momentos, incluso aunque la concejal de Juventud y Normalización Lingüística anunciara el pasado mes de febrero que su departamento tenía la intención de comenzar los trámites para la construcción del albergue "de inmediato y con fondos estatales".

Este alojamiento juvenil también estaba pensado como una manera de paliar los problemas de alojamiento que sufren los estudiantes universitarios de la ciudad. La ausencia de una residencia en el campus es una de las principales quejas de la Universidad, pero aún así el proyecto continúa acumulando retrasos.

El albergue, tal y como lo planteó la concejalía, estaba llamado a ofrecer también un lugar en el que los estudiantes universitarios que participan en el programa europeo Erasmus pudieran instalarse de forma provisional hasta que encontraran una residencia permanente para el período de tiempo que pasan en la ciudad.