Una ecuación difícil de resolver. Es el barrio donde residen más personas por metro cuadrado, pero también donde existe menos superficie para disfrute de los vecinos. En el Agra do Orzán, destacan los arquitectos, sólo hay dos puntos destinados a espacios públicos libres: la plaza de As Conchiñas y la calle Barcelona. En total, poco más de una hectárea.

El Agra, junto a As Xubias, son los protagonistas de la segunda fase del programa A cidade dos barrios, organizado por el colegio de arquitectos. En este caso, el análisis corrió a cargo del grupo Pescadería20. El estudio partió de un parámetro: la densidad. ¿Por qué? Porque los datos son concluyentes y la idea era buscar soluciones, encontrar lugares vacíos que contribuyan a desahogar los elevados índices de densidad. Es el barrio más poblado de la ciudad, con 688,87 habitantes por hectárea, y el que presenta el déficit más importante de espacios públicos, con un metro cuadrado por cada tres residentes.

Lo primero que llamó la atención a los arquitectos es que el Agra do Orzán posee una "gran red social", un "barrio cosmopolitano" donde la inmigración tiene cada vez mayor peso y donde los bares y las tascas sirven a modo de lugar de encuentro de los vecinos, una especie de solución improvisada a la carencia de locales sociales.

Que la plaza de As Conchiñas y la calle Barcelona sean los únicos lugares públicos donde los vecinos pueden reunirse y pasear al aire libre con tranquilidad ha significado que los vecinos centren sus esfuerzos en conseguir que en el proyecto del meteorológico los espacios verdes gocen de mayor protagonismo. Lejos quedan los 25.000 metros cuadrados de parques y jardines prometidos por el ex alcalde Francisco Vázquez. En los planes aprobados por el Ayuntamiento, la cifra se redujo hasta los 14.283 metros cuadrados.

La asociación vecinal del Agra se movilizó y llegó a presentar alegaciones. Su lema: menos cemento y más parque. Lograron reducir la edificabilidad, pero los arquitectos advierten de que aún es demasiado elevada: "Alcanza los 1,23 metros cuadrados por metro cuadrado urbanizable; es un modelo de alta densidad pese a que se vende como parque del Agra". Las últimas previsiones del Ayuntamiento, que hasta ahora siempre se han incumplido, eran empezar la urbanización este año. También pretendía trasladar la sede del observatorio para otro punto del barrio y dejar el edificio para usos sociales, pero el Ministerio de Medio Ambiente no vio el cambio con buenos ojos.

Los coordinadores del estudio defienden las reivindicaciones de los vecinos, sobre todo porque la parcela del observatorio puede jugar un papel fundamental en la modernización del barrio: "No es un solar vacante que queda ahí. Es una parcela estratégica para la conexión del Agra con los barrios anexos, que ahora está absolutamente cercado y con accesos muy complicados".

La otra fórmula que barajan los arquitectos para la "descompresión" del barrio es reutilizar los patios interiores, de titularidad privada, para convertirlos en nuevos espacios públicos. A falta de suelo, aprovechar el que hay. Los encargados del estudio asumen la complejidad de hacer realidad esta opción: "Será muy difícil convencer a los vecinos cuando fuera (en la calle) no la ven, cuando sólo tienen 3.000 metros cuadrados en As Conchiñas y 8.000 en la calle Barcelona".