La Domus acoge desde ayer una exposición de fotografías que pretenden demostrar las peculiaridades de la vida de las personas albinas que viven en España y en Senegal. Las imágenes, captadas por la fotógrafa Ana Iturralde, pretenden demostrar las diferentes connotaciones sociales que tiene el albinismo en función del país de origen de quien lo padece.

La exposición, que podrá visitarse hasta mediados del mes de diciembre, ha sido organizada por la Asociación de Ayuda a Personas con Albinismo, que ha contado con la colaboración de Museos Científicos Coruñeses.

La autora de las fotografías estuvo acompañada durante la presentación por Lluís Montoliu, investigador del Centro Nacional de Biotecnología; Mónica Puerto, presidenta de la Asociación de Ayuda a Personas con Albinismo; Luis Ferrando, un hombre albino; Xosé Antón Fraga, director de Museos Científicos Coruñeses; y la concejal de Cultura, María Xosé Bravo.

Con motivo de la inauguración de la exposición, se celebró una mesa redonda en la que diversos expertos analizaron las repercusiones sociales que tiene el albinismo. Científicos y sociólogos explicaron, por ejemplo, la marginación a la que se somete a los albinos en algunos países por razones culturales o religiosas.