Los comerciantes temen que la crisis económica se lleve por delante las luces de Navidad. "Hay mucho comercio cerrado o remolón", dice el presidente de la Zona Obelisco, Antonio Amor, que prevé que algunos tramos de la calle San Andrés o de las calles adyacentes a la plaza de Lugo, por ejemplo, se queden sin adornar por la falta de locales abiertos y porque el tiempo se les "echa encima" y todavía no han comenzado a encargar los arcos ni las luces. Saben que no se quedarán a oscuras, porque el Ayuntamiento tiene contratado el servicio desde el año pasado y, cuando menos, adornará 26 zonas de la ciudad, pero sí que temen que los puntos de iluminación extra que los comerciantes ponían para complementar el alumbrado municipal -zonas a las que no llegan las luces del Concello, como calles adyacentes a grandes núcleos como Cuatro Caminos- no vean el frío este año.

Donde los empresarios están acostumbrados a montar el alumbrado por su cuenta es en Matogrande, según el presidente de la asociación de comerciantes, José Antonio Ferreira, llevan los diez años de vida de la agrupación sin recibir ni un euro para sus adornos, así que se están "autoorganizando". El 95% de los propietarios de negocios del barrio ha contribuido "con diferentes cantidades" y, otra parte, la abonará la asociación.

Algo más cuesta arriba lo tienen los comerciantes de Os Mallos, ya que la asociación les ha pedido una cuota de 30 euros para hacer frente a la colocación del alumbrado navideño, aunque esa cifra, según el presidente de Distrito Mallos, es demasiado elevada para unos comercios que están en la cuerda floja, decidiendo si cierran o aguantan un poco más. "Muchos negocios han cerrado y algunos de los que siguen están muy apurados. Estamos mal, pero en Navidad, sin luces, estaremos peor. Es necesario ponerlas", concluye el presidente de Distrito Mallos, José Salgado, que confía en la ayuda del Ayuntamiento para poder adornar, aunque sólo sea, las calles de los comerciantes que han abonado la cuota de 30 euros. "No nos atrevemos a encargar los arcos por si nos quedamos colgados", dice Amor, que tendrá luces, al menos en Obelisco por orden del Concello, pero tendrá que gestionar otras zonas cercanas.

El Ayuntamiento aseguró ayer que la empresa adjudicataria de la colocación de las luces navideñas -Blachere Illumination, la misma del año pasado, ya que el concurso tiene una validez de dos ejercicios- comenzará a trabajar esta semana, aunque no se pondrán todavía los motivos decorativos, sino que se empezará por instalar los soportes a los que irán anclados.

El Ayuntamiento cuenta con que la iluminación sea "más o menos" como la del año pasado, aunque contempla la posibilidad de que la empresa incluya algún cambio, en la ubicación o en los diseños de los motivos decorativos.

En 2009, hubo más de un millón de puntos de luz en las calles de la ciudad y los cantones lucieron una estructura metálica con forma de cono de 20 metros de alto que estaba cubierto de luces azules, llamado "abeto". Los motivos navideños llegaron a 448 farolas, se instalaron 85 arcos, 102 árboles, se iluminó la fachada del Ayuntamiento con luces de diferentes colores y también la rotonda del pavo real.