La planta de reciclaje de Nostián se ha convertido en uno de los principales sacos sin fondo para las arcas municipales. A los 60 millones de euros que Albada reclamó el año pasado al Ayuntamiento se unen ahora otros 24,7 que la Xunta cree que serán necesarios en la próxima década para garantizar el funcionamiento y la mejora de la instalación. El Gobierno gallego recomienda ampliar las instalaciones en 13.500 metros cuadrados para tratar la basura que ahora procede de la comarca de A Coruña. La Consellería de Medio Ambiente ya alertó en 2009 de que el recinto de Nostián está "prácticamente en el límite de su capacidad". El ejemplo más claro es el envío constante de camiones llenos de residuos a un vertedero de Sobrado dos Monxes.

El plan autonómico para la gestión de los residuos urbanos que comprende el periodo 2010-2020 establece una serie de objetivos claves para mejorar la operatividad en la planta de Nostián, entre los que destacan la necesidad de ampliar la capacidad de separación de residuos inorgánicos y de compostaje de la materia orgánica residual, así como una preparación "adecuada" de los rechazos y mejoras en el tratamiento de aires.

La Xunta defiende que es necesario ampliar las instalaciones que gestiona por concesión Albada, una empresa contratada por el Ayuntamiento. La administración municipal todavía no se ha hecho cargo del complejo de Nostián. La Consellería de Medio Ambiente asegura en su plan que el Concello deberá invertir 24,7 millones para mejorar el funcionamiento de la planta, y que se suman a los 60 millones que Albada reclama al Ayuntamiento.

El Ejecutivo local se negó en el pleno del lunes a aclarar la situación económica del proyecto de Nostián y sobre si al final compensará a Albada por los sobrecostes en el proyecto. La concesionaria denunció el año pasado que el Ayuntamiento le adeuda 60 millones por la reforma en las instalaciones y por el traslado de basura a un vertedero ante la falta de espacio en Nostián -los camiones se desplazaban primero hasta Areosa, en Cerceda, y ahora transportan los residuos hasta Sobrado dos Monxes-.

El Gobierno gallego aconseja, entre otras obras, cerrar la zona de descarga de rechazos de la fracción orgánica, ampliar la nave para inorgánicos, habilitar un almacén para el compost y adquirir nuevos sistemas para todo el proceso de reciclaje de los residuos, desde la llegada de los camiones a la planta hasta la elaboración del compost. Medio Ambiente ya alertó hace dos años de que Nostián se encuentra al borde del colapso: "Se constata la saturación de la principal planta de tratamiento (en referencia a Sogama), así como las dificultades de gestión de la planta de Nostián".

El plan de gestión de residuos urbanos para la próxima década propone que la ampliación final del complejo coruñés alcance los 13.500 metros cuadrados. Según las previsiones de la Xunta, de cumplirse su propuesta, la instalación de Nostián pasará de recibir 167.500 toneladas de basura al año -de acuerdo a los datos facilitados por el Ayuntamiento en 2009- a las 281.500, es decir, alrededor de un 60% más de residuos.