La renuncia de la Xunta a construir la residencia universitaria pública y la justificación que el recién investido alcalde realizó de la decisión no han pasado inadvertidas para la oposición municipal, que ha volcado sus actuaciones en el ámbito educativo. Los socialistas consideran "una burla" que el regidor no exija al Ejecutivo gallego que cumpla con el compromiso adquirido con el Rectorado y el BNG denuncia que la Administración autonómica quiera convertir lo que nació como proyecto público en "un negocio". Ambas fuerzas políticas coinciden en que la de A Coruña "no puede ser la única universidad del estado que carezca de una residencia pública" y presentarán, por separado aunque con el mismo contenido, una moción al respecto para que sea debatida en pleno.

"La lamentable decisión de renunciar a la construcción de una residencia pública es una bofetada a la ciudad en donde más le duele, en la Universidad; por no hablar del ataque a los servicios públicos que supone utilizar un suelo que ha sido expropiado a los vecinos con el dinero de los ciudadanos", sentenció ayer la portavoz del PSOE local, Mar Barcón.

De los vecinos de San Vicente de Elviña también se acordaron ayer los nacionalistas. "Sería muy difícil explicar a quienes pidieron poder seguir viviendo con dignidad y en el propio lugar que la expropiación de sus tierras y de sus casas es para la construcción de una residencia privada concebida como negocio", subrayó el portavoz del BNG coruñés, Xosé Manuel Carril, que recordó la necesidad de "infraestructuras residenciales propias" en pleno proceso de adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior y de internacionalización de los estudios.

Nacionalistas y socialistas responden así a la invitación realizada por la Universidad a los poderes públicos para reclamar una residencia universitaria pública. "Instamos a la Xunta a que retome las conversaciones con la Universidade da Coruña, que pese a sufrir dos años de paralización del proyecto siempre estuvo dispuesta al diálogo, incluso renunciando a algunos aspectos iniciales", apostilló Carril convencido de que la negativa de los populares "no es admisible para la ciudadanía".

Concesión a precios asequibles

El conselleiro de Infraestruturas, Agustín Hernández, se defendió ayer de las críticas al proyecto de la residencia universitaria y a su apuesta por dejar en manos de una concesionaria la gestión de la futura instalación.

“Existe la firme voluntad de construir una residencia pública, funcional y operativa”, destacó Hernández. En su opinión, la única forma para conseguir que sea viable es a través de una concesión. El conselleiro se comprometió a sacar a concurso la obra “en los próximos meses” y criticó la “falta de voluntad” de la Universidad. Destacó que el ente académico será el responsable de fijar los precios de la residencia, precios “asequibles”, según el alcalde, Carlos Negreira, después de “más de seis años mareándose la perdiz” con esta obra. Fermín Navarrina, candidato a rector, lamentó que la Xunta rompa “unilateralmente” con el proyecto inicial y deje la gestión de la residencia en manos de una empresa privada.

Los socialistas, de estreno

El grupo municipal socialista ofreció ayer su primera rueda de prensa en el local que tiene asignado en el Palacio Municipal de María Pita, cambiando así los grandes salones que emplean quienes ostentan el bastón de mando de la ciudad por dos despachos y una pequeña sala con una mesa y escasas diez sillas a su alrededor. Cuando gobernaba, el PSOE ya disponía de esta oficina, que había sido despacho del edil socialista José Nogueira, pero no había organizado ningún acto o reunión pública en él.