Trabajadores de la Fábrica de Armas se concentraron ayer a las puertas de la factoría de Santa Bárbara Sistemas para reclamar "más carga de trabajo y nuevos contratos" que acaben con la situación de discriminación que denuncian que sufren. El vicepresidente del comité de empresa, José Carrillo, advierte de que se van a encontrar "sin carga de trabajo para los próximo tres años", ya que asegura que la ocupación de las instalaciones no llega al 30%.

En este sentido, recalcó que no hay "nuevos pedidos" y acusó a la dirección de la empresa en Madrid de discriminar a la fábrica coruñesa en temas de inversión, cargas de trabajo y reorganización de plantilla. Carrillo indicó que esta situación puede llevar al cierre de la empresa "a la primera de cambio". Además, reclamó a la compañía que dé un giro en la estrategia de mercado. "Podemos trabajar para el sector civil, aeronáutico, privado", afirmó el representante de los trabajadores.