El Gobierno local calificó ayer de "mejorable" el convenio que mantiene el Ayuntamiento con la Compañía de Tranvías y cuya vigencia concluye en 2013, pero rechazó la posibilidad de modificarlo o romperlo de forma unilateral. Justificó para ello que esa actuación implicaría la entrega a la concesionaria de "elevadas indemnizaciones", según advirtió el portavoz del Ejecutivo. En virtud de ese convenio y tras la revisión anual conjunta del nuevo Gobierno con la empresa adjudicataria, el billete subirá de 1,15 euros a 1,20 y cada viaje de bonobús, hasta los 76 céntimos.

Frente a las críticas vertidas en los últimos días por socialistas y nacionalistas al aumento que se aplicará el próximo año a las tarifas del bus urbano, el responsable municipal de Movilidad explicó que la fórmula utilizada para calcular la subida del precio de los viajes "no es nada nuevo", ya que se basa en el acuerdo alcanzado con Tranvías en 1986 y en el que se adoptó en 1991 para poner en marcha el bonobús.

El convenio suscrito por la empresa y el Concello fija una fórmula polinómica para calcular el precio del viaje en autobús, en la que los factores a tener en cuenta con los salarios de los empleados de la concesionaria, el precio del gasóleo y el de los vehículos empleados para el servicio, a los que se añaden el IPC y los beneficios obtenidos por la compañía. De acuerdo con la aplicación de los datos de 2011, la fórmula arroja un incremento aplicable del 6,75% para el próximo año sobre la tarifa de 1,16 euros, lo que da como resultado que será de 1,24 euros, según la información facilitada por el Ayuntamiento.

El titular de Movilidad contrastó la actuación del Partido Popular en esta materia con la de sus antecesores, ya que dijo haber logrado que la Compañía de Tranvías se haga cargo de la mitad del incremento aprobado para 2012, lo que supone 4 céntimos, así como que mantendrá la gratuidad de más de un millón de transbordos que se cobraron al precio de 6 céntimos hasta 2003.

"No podemos pagar lo que no tenemos", manifestó Flores en relación al importante coste que tendría la retirada de la concesión a la empresa. En su opinión, el rechazo de PSOE y BNG a las nuevas tarifas es una demostración de "demagogia, cinismo e irresponsabilidad", ya que aseguró que ambos partidos exigen ahora una revisión del convenio con Tranvías después de haberle transferido 28 millones de euros durante la pasada legislatura municipal.

"Este Gobierno local ha buscado insistentemente las auditorias realizadas a la empresa concesionaria durante el anterior mandato y no ha encontrado ninguna", explicó Flores, quien detalló que el sistema empleado para determinar el incremento de las tarifas del próximo año fue el utilizado para las aplicadas en 2004 y 2006, así como que socialistas y nacionalistas aprobaron una subida del 20% durante sus cuatro años de gobierno conjunto.

Flores añadió que el Gobierno local trabaja ahora para conseguir que la Compañía de Tranvías costee el próximo año una renovación de su flota y puso de relieve que en 2010 el anterior Ejecutivo no logró que la concesionaria asumiese ni un céntimo de los cuatro en los que se aumentó la tarifa general y para el actual solo alcanzó un acuerdo para que aportase uno de los 6 céntimos que se incrementó el billete.

Uno de los aspectos destacados por el responsable de Movilidad es el aumento en 1,1 millones de euros de la cantidad destinada en los presupuestos municipales para subvencionar el bonobús en 2012, con el fin de que se mantengan las condiciones actuales. Mediante esta decisión, el Ayuntamiento aportará el 37% -0,44 céntimos- del coste de cada viaje con el bonobús general, con el que se realizan más de 10 millones de trayectos al año, así como el 75% -0,89 euros- en cada uno de los más de 3 millones de viajes realizado con el bonobús social. El interventor advirtió, en su fiscalización de los presupuestos municipales, de que la cantidad reservada para el bonobús resultará insuficiente. El Ejecutivo asume que, en caso de ser necesario, se aprobará un modificativo de crédito, un sistema que habían criticado desde la oposición.

Flores declinó comentar los beneficios de 4 millones de euros obtenidos por la Compañía de Tranvías durante el pasado año con el argumento de que se trata de la actuación de una empresa. El edil defiende que los 1,27 millones de euros reflejados en el balance de la empresa y cuyo destino el BNG consideró poco claro se trata de la cantidad reservada para el pago del Impuesto de Sociedades. También destacó que el incremento de la subvención concedida al bonobús no implica más beneficios para la empresa concesionaria ni reduce su posible déficit de explotación.