PSOE y BNG calificaron ayer de "desproporcionados" y "desorbitados" los intereses que deberá pagar el Concello al Instituto de Crédito Oficial (ICO) por el préstamo de 7 millones que solicitó el Gobierno local para abonar facturas pendientes. Socialistas y nacionalistas calculan que las arcas municipales podrían llegar a abonar más del 7% de la cantidad solicitada en los próximos años, lo que supondría más de dos millones de euros.

El PSOE cree que las condiciones del organismo dependiente del Gobierno central son "más propias de un prestamista ventajoso que de lo previsto para una administración pública" y apuntan que el anterior Ejecutivo municipal solo pagaba el Euribor más 0,75. El partido de la oposición añade que esta operación de endeudamiento demuestra la "incapacidad de gestión" del alcalde, Carlos Negreira. El BNG considera "espectacular" el gasto financiero que supondrá el crédito y afirma que el superávit del año pasado llegaba a los 3,8 millones, calificando así de "ideológico" el préstamo solicitado.