Un hombre de 39 años fue condenado a dos años y cuatro meses de cárcel por robar en dos días en 14 vehículos que estaban estacionados en diferentes calles de la ciudad. El procesado, que tiene antecedentes penales por cometer hechos similares, violentó los coches y sustrajo los objetos de valor que había en su interior. La magistrada del Juzgado de lo Penal número 2 de A Coruña, además de 28 meses de prisión, le impuso el pago de una indemnización a las compañías aseguradoras de los vehículos por los daños que les causó.

Los hechos, según el fallo judicial, sucedieron los días 3 y 4 de septiembre del año pasado en las calles Corcubión, Pasteur, Revolución Francesa y ronda de Outeiro. En esa época, según indicó entonces la Policía Nacional, se produjo una oleada de robos en coches en diferentes barrios de la ciudad.

El condenado cometió el primero de los 14 hurtos en la calle Corcubión entre las 22.00 horas del día 3 y las 01.30 horas del día 4. La juez relata que accedió al interior de un turismo, revolvió todo y se apoderó de unas gafas de sol, una linterna, una navaja y un pendrive.

El mismo día de madrugada, violentó el cristal de la ventanilla del copiloto de un vehículo que estaba aparcado en la calle Revolución Francesa y robó unas gafas de sol. El propietario del coche renunció a cualquier indemnización que pudiera corresponderle por estos hechos. El procesado, esa noche, se apoderó de los objetos que había en otros cuatro turismos.

El pasado día 2 de septiembre, el condenado utilizó el mismo modus operandi para acceder al menos al interior de cuatro coches. El sospechoso, según la sentencia, no se apoderó de ningún efecto en 10 de los 14 turismos que violentó porque no encontró nada de su interés en el interior. En una ocasión, no llegó a entrar en uno de los coches; y, en otra, fue sorprendido por el dueño del turismo que estaba estacionado en la calle Pasteur cuando manipulaba la guantera.

El condenado fue arrestado por efectivos de la Policía Nacional el 4 de septiembre sobre las tres de la madrugada cuando todavía recogía dentro de un coche objetos de valor. Los agentes localizaron debajo del turismo la baldosa que presuntamente utilizó para romper las ventanillas de los vehículos.

Los funcionarios, además, intervinieron 149 euros en efectivo, un teléfono móvil, dos pares de gafas de sol, un estuche para guardar CD, un juego de llaves del domicilio de una de las víctimas, una navaja y una linterna. Todos los objetos que portaba el sospechoso en el momento de su arresto fueron reconocidos por los propietarios de los coches que fueron violentados.

Todos los turismos resultaron con desperfectos, según destaca la magistrada en la sentencia, en la que condena al imputado a indemnizar a los afectados en las cantidades que establezcan los peritos encargados de tasar los daños. La juez tuvo en cuenta a la hora de dictar la pena la agravante de reincidencia.