El hierro es el material del trabajo del escultor Carlos Albert que destaca la facilidad para manipularlo como si fuera un dibujo y la posibilidad de crear espacios en el vacío. Los amantes de la escultura podrán visitar algunas de sus obras relacionadas con el mar y el naval en la galería Atlántica hasta el 15 de noviembre.

-¿Qué tipo de piezas ha seleccionado para esta exposición?

-La muestra recoge una veintena de esculturas y diez collages que además de servir como bocetos previos tienen valor por sí mismos. La mayoría son obras hechas en hierro forjado aunque también empleo en algunas el acero corten.

-¿Las piezas siguen alguna línea temática concreta?

-Cada escultura es independiente y se refiere a un tema específico, pero el título no deja de ser algo secundario y anecdótico. Aunque sirva de pista lo más importante es el sentimiento que evoca que lo que representa. Abundan sobre todo las esculturas vinculadas con el mar y el sector naval.

-¿Por qué decidió tratar el mar en la mayoría de sus obras?

-Me decanté por abordar esta temática después de visitar los astilleros Nodosa en Bueu donde fabricaron las esculturas monumentales que tengo en Cangas y en la localidad madrileña de Parla. Me llamó la atención ver los barcos descompuestos por piezas y de ahí saqué ideas para algunas obras.

-¿Qué le empujó a trabajar con hierro forjado?

-Cada material tiene su propio lenguaje. En la facultad trabajaba sobre el lienzo y sobre él fui creando texturas que se transformaron en relieves. Empecé con materiales más cómodos como el barro o la madera y después probé con el hierro forjado. La escultura tiene mucho de dibujo y las barras de hierro permiten trabajar con ellas de forma lineal como si se estuviese dibujando. El hierro a pesar de ser un material frío, duro y pesado puede cobrar expresividad por sí mismo y despertar emociones a través de volúmenes.

-¿Cuáles son las ventajas que permite este material?

-El hierro ofrece la posibilidad de trabajar en el vacío y construir volúmenes no solo con lo que ocupa sino también con el hueco y el vacío que deja. Eso no se puede hacer con otros materiales como la piedra que aparte de ser más difícil de manipular crea volúmenes opacos y de lleno total.