Imágenes de escolares coruñesas desnudas se están difundiendo, desde el miércoles, a través de la aplicación de móvil Imágenes desnudas WhatsApp entre compañeros de clase, de otros colegios e institutos de la ciudad e, incluso, de centros de otras ciudades, como Salamanca. La red social Twitter -en la que se escriben comentarios de no más de 140 caracteres- cuenta ya con dos etiquetas en las que sus usuarios opinan sobre este material, en algunos casos de alto contenido erótico.

La Policía Nacional abrió ayer una investigación sobre los hechos tras tomar conocimiento de la denuncia presentada por el padre de una de las víctimas, que es menor de edad y estudiante de Bachillerato. La dirección de uno de los centros a los que supuestamente pertenece una alumna aseguró ayer desconocer los hechos.

Un portavoz del 091 aseguró que la investigación que está desarrollando la Unidad de Delitos Tecnológicos tratará de dilucidar las razones por las que estas imágenes han salido del ámbito privado con el fin de esclarecer los hechos y poner la información a disposición judicial. Aunque la denuncia no se efectuase, los agentes podrían haber actuado de oficio, aunque su labor se complicaría, ya que carecerían de la versión de los afectados.

Los usuarios de las redes sociales y los estudiantes adolescentes que recibieron las fotos y, según aseguran, también dos vídeos en sus teléfonos comentan que los protagonistas de estos contenidos habían creado un grupo en WhatsApp en el que se intercambiaban fotografías desnudos -los protagonistas son chicas y, al menos, un chico- e, incluso, masturbándose o simulando que lo hacen, y que, debido a un enfado entre sus miembros, esas imágenes saltaron del grupo privado a una red pública; otra versión de la difusión de este material, según explican los usuarios de Twitter y algunos de los jóvenes que conocen a los afectados, señala a un hermano de una de las chicas fotografiadas como el responsable de que las imágenes fuesen pasando de teléfono en teléfono entre los adolescentes.

Los usuarios de la red social Twitter utilizan varias etiquetas para verter sus opiniones sobre este material de corte erótico. Algunas de las fotografías que pertenecen a estudiantes coruñesas muestran a jóvenes masturbándose o simulando que lo hacen, y haciéndose fotos a sí mismas desnudas con el móvil ante el espejo de un cuarto de baño.

Un caso similar al de A Coruña se produjo ya en noviembre, cuando fotografías y vídeos eróticos de alumnas de la Universidad de Deusto empezaron a circular por los móviles de los estudiantes de este centro religiosoA Coruñafotografías vídeos alumnas de la Universidad de Deusto. En este caso, sí que hubo denuncia e investigación.

La reforma del Código Penal establece un castigo de hasta un año de prisión para los responsables de la difusión no autorizada de grabaciones o imágenes íntimas obtenidas con el consentimiento de la víctima pero sin permiso para su divulgación. Esta modificación en la normativa se introdujo después de que una grabación erótica privada protagonizada por la edil socialista de Los Yébenes Olvido Hormigos, fuese difundido por internet sin el consentimiento de su protagonista.