La Compañía de Tranvías cuenta desde ayer con un nuevo director general, Javier Contreras Rodríguez de Rivera, procedente de Alsa, que se encargará de gestionar el día a día de la empresa, aunque José Prada Muradás se mantendrá en la presidencia de la concesionaria del transporte público urbano de A Coruña, en la que su familia es la accionista mayoritaria. Hasta el momento, Prada se responsabilizaba de la dirección de la compañía, asistido por Wenceslao López Alvargonzález, quien se hacía cargo de las cuestiones relacionadas con el personal, aunque este directivo también permanecerá en el cargo de consejero que ocupa en el organigrama de la sociedad.

Tranvías explica que el nombramiento de un director general "refuerza" el equipo directivo de la empresa y que el objetivo de Contreras será el de "mejorar día a día el servicio de transporte público de la ciudad", así como "fomentar el uso del autobús en beneficio del medio ambiente". El nuevo director general posee experiencia en el campo del transporte. Era adjunto a la dirección general de la División de Urbanos de Alsa. Anteriormente trabajó en la empresa de paquetería TNT Express.

El relevo de Prada al frente de la gestión directa de la compañía se produce tras las críticas recibidas por Tranvías por un sector de la oposición y por colectivos ciudadanos a los elevados beneficios que le proporciona el contrato de la concesión que mantiene con el Ayuntamiento desde 1986 por los continuos incrementos de tarifas que le permite aplicar.

Prada, de 57 años, se incorporó a la Compañía de Tranvías con solo 22, ya que su padre era entonces el presidente de la sociedad. Dos años más tarde fue nombrado gerente de la concesionaria, por lo que se encargó de la sustitución de los trolebuses por los autobuses y de la dirección de la empresa hasta la actualidad, compatibilizando en los últimos años este puesto con el de presidente del consejo de administración.

La Compañía de Tranvías, fundada en 1901, dispone en la actualidad de 23 líneas en el municipio cuyos vehículos recorrieron 5,7 millones de kilómetros en 2012.